Vie Mar 29, 2024
29 marzo, 2024

Masivo plebiscito por la independencia en Basur (Kurdistán iraquí)

El 25 de setiembre pasado, se realizó el plebiscito para apoyar o rechazar la independencia de Basur (Kurdistán iraquí) de Irak. La consulta fue convocada por el gobierno de Massoud Barzani, presidente de la actual región autónoma.

Por Alejandro Iturbe

Según  las informaciones, participaron 3,4 millones de personas, de las cuales 91,8% votó por el SÍ. Al conocerse los resultados, la población kurda festejó en las calles de las ciudades de Basur.

Antes del referendo, el Tribunal Supremo de Irak había ordenado su suspensión, pero esto no fue aceptado por el gobierno de Basur. Después del mismo, el primer ministro iraquí, Haidar al Abadi, amenaza con desplegar al ejército en caso de una declaración de independencia. Barzani respondió que No habrá independencia inmediata” y propuso “el inicio de conversaciones serias con Bagdag” para llegar a un acuerdo y delimitar las fronteras.

Cuando el plebiscito fue convocado, escribimos un artículo que no había sido publicado. Lo reproducimos porque consideramos que sus principales conceptos continúan plenamente vigentes.

En el artículo “Sobre la lucha del pueblo kurdo” (1),  analizábamos que “Actualmente, en Irak, los kurdos viven una situación especial. En este país, ocupan la porción norte del país [NdR, la denominan llaman Basur que signfica “Kurdistán del sur”],  una de las dos zonas ricas en petróleo del actual territorio iraquí”.

La principal organización política es el PDK (Partido Democrático del Kurdistán), una organización que expresa esencialmente a la burguesía kurda de la región  Cuando se produce la invasión imperialista, en 2003, la dirección del PDK, encabezada por Massoud Barzani (2) se une a la coalición de fuerzas liderada por el imperialismo estadounidense que invade Irak y derroca el régimen de Saddam Hussein.

Derrocado Saddam, la Constitución iraquí de 2005 otorga a Basur el carácter de “entidad federativa autónoma” con derecho a elegir su propio gobierno y su parlamento, y también a tener sus propias relaciones exteriores. Siempre hubo representantes kurdos en los gobiernos proimperialistas de todo el período de ocupación. Incluso un kurdo, Jalal Talabani, llegó a ser presidente del país.

En los hechos, el PDK pasó a administrar su propio Estado (con capital en la ciudad de Erbil), aunque este territorio siga formalmente integrando Irak. Posteriormente, las fuerzas militares de Basur (los peshmergas) lograron frenar la ofensiva del Estado Islámico en Mosul y mantener intacto su territorio.

Dentro del universo kurdo, se trata de una burguesía privilegiada: pasó de recibir de 13% a 30% del valor del petróleo extraído y exportado desde esa región. Esto, sumado a una buena producción agraria, la ha transformado en una de las más ricas de Irak, con una economía muy sólida.

Esta es la base sobre la que se asienta el PDK, partido que, además de su carácter burgués, se ha transformado en una organización claramente ligada al imperialismo estadounidense. Un dato importante caracteriza a este partido y a su gobierno: Basur es el principal exportador de petróleo hacia Turquía, donde el gobierno de Erdogan oprime y reprime a millones de kurdos.

Al mismo tiempo, la presión hacia la unidad kurda es tan grande que el gobierno de Barzani se vio obligado a enviar armas a Kobane (aunque a través de los aviones imperialistas) y a permitir que batallones de milicianos peshmergas fueran a combatir contra el EI, junto con sus hermanos de Rojava.

Aumenta la inestabilidad

Sin embargo, a pesar de esta posición privilegiada, en Basur ha aumentado muchísimo la inestabilidad política. El presidente Barzani ha prorrogado su mandato sin elecciones, ha cerrado el Parlamento hasta octubre y expulsó de la capital (Ervil) al presidente de esta institución.

Las informaciones periodísticas hablan de manifestaciones contra el gobierno en el oeste y el sur del país, y de un resurgimiento en estas regiones de la influencia del UPK (una escisión del PDK que fue derrotada por este en una guerra civil entre 1994 y 1997) e incluso del propio PYD-PKK de Rojava. Otro elemento adicional es que el gobierno de Barzani ha recibido críticas muy fuertes de la comunidad yazidi (una minoría kurda iraquí no musulmana) que lo acusa de no haberlos defendido ante el EI y, ahora, frente a los ataques del gobierno central iraquí. 

El plano de fondo de esta inestabilidad  y de este descontento parece ser un deterioro de la economía originado en la baja de los precios internacionales del petróleo. Esto ocasionó una reducción importante de la fracción de la renta petrolera que queda en manos de la burguesía de Basur y también generó una fuerte disputa con el gobierno central iraquí ya que ha reducido al mínimo la parte que Basur entregaba. Como respuesta, el gobierno central iraquí hace varios meses que no está pagando los salarios de un  sector de empleados kurdos que dependen de él (3).

El referéndum por la independencia

En este marco, el gobierno de Barzani anunció la convocatoria del referéndum para aprobar la independencia de Basur, luego del cual se reabriría el Parlamento (4). Tratándose de Barzani y del PDK es muy difícil saber si realmente están dispuestos a avanzar en esta dirección (para quedarse con la fracción de la renta petrolera que ahora entregan al gobierno central de Irak), si es un globo de ensayo o apenas una maniobra para capear el temporal opositor. Solo en los próximos meses sabremos la respuesta.

Pero el anuncio de Barzani ya había abierto fuertes polémicas. En primer lugar, en el universo kurdo. La página Rojava Azadi (publicada por kurdos de Rojava) publica dos artículos con posiciones opuestas sobre esta posible independencia.

El primero, que expresa la posición oficial de la página (cercana al PYD-PKK) da varios argumentos en contra:

  1. Aún no hay solidez militar kurda para enfrentar las consecuencias de esta decisión: un posible ataque del ejército iraquí (apoyado por tropas iraníes) que defenderían la unidad de Irak.
  2. Ese “estado independiente” quedaría de hecho bajo la tutela de Turquía, tanto en su economía (exportación de petróleo) como el campo militar.
  3. No se puede confiar en la alianza con el imperialismo que ya en el Tratado de Lausane (1923) entregó a los kurdos como moneda de cambio.
  4. Por eso, caracteriza este referéndum como una maniobra de Barzani ante su debilitamiento.

Existe otra razón no explicitada que vemos en el segundo artículo que apoya el llamado de Barzani y el referéndum por la independencia: la disputa entre el PDK y el PKK por la dirección política del conjunto de los kurdos (5).

En ese material, el autor expresa: “Un Estado kurdo iraquí sería una empresa racional y útil…que favorecería la paz en la región” porque  ayudaría a moderar los enfrentamientos en otros países, especialmente en Turquía. Él considera que las excelentes relaciones entre Barzani y el gobierno turco de Erdogán serían un factor favorable y no en contra del proyecto. Más allá de este juicio de valor, el artículo  aporta elementos muy interesantes sobre estas relaciones (lo que se agrega al hecho ya señalado de que Basur es el principal proveedor de petróleo de Turquía):

“Ankara y Erbil mantienen ya relaciones de Estado a Estado y cooperan en todos los terrenos, económico, político, e incluso militar y estratégico. El sector privado turco está activo en Erbil y Dohuk (energía y construcción). A nivel militar, hace más de veinte años que Ankara mantiene bases en la región autónoma kurda. Durante el último encuentro en Ankara de los presidentes turco y kurdo iraquí (…) Erdogan y Barzani han saludado, por primera vez en la historia turca, las banderas turca y kurda, mano a mano, para mayor satisfacción de los kurdos de Irak”.

Para este autor, el principal obstáculo en este camino sería el PKK y sus métodos guerrilleros. Por el contrario, el camino posible es apoyar la línea del partido kurdo-turco HDP (Partido por la Paz y la Democracia): abandonar los reclamos de autonomía y autodeterminación, apostar a su crecimiento en el Parlamento turco y también ganar las alcaldías en la región kurda de Turquía. Es decir, una política de acuerdos con Erdogán.

La burguesía turca, como vimos, está haciendo muy buenos negocios con la burguesía de Basur expresada por Barzani (con una relación subordinada por parte de esta). Hasta lo reciben como un jefe de estado. Un Basur independiente dirigido por Barzani impulsaría aún más esta dinámica y podría beneficiar mucho a Erdogán, Por un lado, Barzani sería un aliado pleno para intentar bajar las tensiones con los kurdos turcos, presionarlos a las negociaciones y derrotar al PKK (o por lo menos, cooptarlo o dividirlo) impulsando el desarrollo de una burguesía kurdo-turca intermediaria de esos negocios.

Por otro lado, un Basur independiente debilitaría a Irak y la influencia del régimen de los ayatolás iraníes en ese país, favoreciendo a Turquía en la disputa por la influencia regional que mantiene con Irán. La fuerte contradicción de Erdogán es que la independencia de Basur podría fortalecer el proceso de Rojava y alentar también la voluntad de lucha por la autonomía de los propios kurdos de Turquía.

En el propio imperialismo ha comenzado el debate. El director de la Agencia de Inteligencia de Defensa de Estados Unidos (DIA), general Vincent Stewart, ha advertido al Senado de Estados Unidos: “La independencia del Kurdistán [de Irak] sigue su trayectoria y ya es inevitable. Y la situación se complicará a menos de que haya un acuerdo en Bagdad”. En ese informe, resaltó “la importancia del diálogo entre el Gobierno de Bagdad y las autoridades del Kurdistán iraquí para que haya un entendimiento mutuo y consenso entre las partes sobre el tema de la independencia de la mencionada región” (6).

Aclaremos que la DIA es solo una agencia de asesoramiento y no uno de los ámbitos que definen la política exterior estadounidense. Pero su posición es un indicativo importante y su propuesta puede verse reforzada por el giro de distanciamiento y aumento de roces del gobierno Trump con el régimen iraní de los ayatolás.

Nuestra posición

¿Cuál debe ser nuestra posición frente a esta posible independencia? Tal como señalamos en el artículo anterior del 2016: “Este objetivo [la independencia de Basur, NdR] sería, en sí mismo, progresivo: un avance en la lucha de este pueblo, porque daría un punto de apoyo si fuera puesto al servicio de la lucha kurda de conjunto. Pero en manos de Barzani y el PDK significa dejar de lado la lucha por la construcción de un Estado kurdo unificado y abandonar a su suerte a los kurdos de Turquía, Irán y Siria”.

Es decir, defendemos y apoyamos ese derecho a la independencia. Más aún, si luego de  declarada, es atacada militarmente. En ese caso, tendremos un campo militar absolutamente definido: el del pueblo kurdo.  Creemos incluso que ya estaría planteada como necesaria y posible la unidad inmediata de Rojava y Basur en un único estado federado.

Al mismo tiempo no damos ningún apoyo ni llamamos a confiar en las actuales direcciones kurdas, tanto por su carácter de clase (burgués o pequeño burgués) como por la política que llevan adelante (como el abandono de la lucha por el estado kurdo unificado). Esto significa que, siendo parte del campo de la lucha del pueblo kurdo, las combatimos políticamente, llamamos a combatir sus políticas que van contra la lucha unitaria de los kurdos (como los acuerdos con el imperialismo y Putin) y les exigimos que apliquen políticas que impulsen esta lucha. En el caso de la autonomía en Irak, está planteada además, de modo inmediato, la lucha de clases del proletariado kurdo de Basur contra la burguesía kurda expresada por Barzani”.

En el marco de este proceso de lucha, llamamos a ir construyendo nuevas direcciones kurdas que estén dispuestas a llevar ese combate hasta el final. De modo específico, creemos que está planteada la necesidad urgente de construir un partido obrero, revolucionario y socialista kurdo que, además de impulsar e intervenir activamente en esas luchas, ubique la construcción del estado kurdo unificado como parte de la tarea de avanzar hacia una federación de repúblicas socialistas de Medio Oriente.

Notas:

1- http://litci.org/es/teoria/sobre-la-lucha-del-pueblo-kurdo/

2- Masud Barzani es hijo de Mustafá Barzani, fundador del partido y uno de los líderes de la efímera República de Mahabad, establecida en territorio iraní en 1946.

3-Información del site Rojava Azadi en: https://rojavaazadimadrid.wordpress.com/2016/07/23/hacia-un-kurdistan-iraqui-independiente/

4-Información de la página OK Diario en:https://okdiario.com/internacional/oriente-proximo/2017/05/08/gobierno-del-kurdistan-iraqui-anuncia-referendum-independencia-septiembre-974821

5- Su autor es el kurdo Bayram Balci, actualmente  investigador y especialista en Oriente Medio del Centro de Estudios Internacionales Sciences Po de París. Por sus posiciones, parece ligado tanto a Barzani como al CNK de Rojava.

6- http://www.newslocker.com/es-py/region/independencia/eeuu-la-independencia-del-kurdistn-de-irak-es-inevitable-hispan-tv-comunicado-de-prensa/view/

 

 

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