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Patagonia chilena: ¡Sin represas!

mayo 13, 2011

Nuevamente estamos en presencia del servilismo de nuestros Gobiernos, ante la política norteamericana; antes lo hizo la Concertación hoy lo hace Piñera. En esta ocasión se trató de la firma de un Tratado para la ayuda recíproca en materia de energía nuclear y la búsqueda de su implementación en territorio chileno.



Desde FR- Izquierda Comunista declaramos que estamos en contra no solo de la implementación de la Energía nuclear para Chile, sino también en contra de los proyectos como Hidroaysén y la Central termoeléctrica Castilla. Las razones son muy sencillas, se quiere convertir a nuestro país en un basurero ambiental para así poder generar la energía que necesitan las multinacionales que operan en nuestro país, sobre todo las mineras. En el caso de la termoeléctrica Castilla, su sola implementación significará recurrir a combustibles de altísimo grado de contaminación, como es el carbón pulverizado (tecnología obsoleta en Europa); pero además su área de contaminación se sentirá en cientos de hectáreas.



Por otra parte, estamos en contra de Hidroaysén, porque su construcción significará la inundación de miles de hectáreas de la Patagonia; este proyecto contempla la operación de cinco centrales hidroeléctricas, dos en el río Baker y tres en el río Pascua, acabando en muchos casos con bosques completos de la Patagonia chilena, y por ende de su biodiversidad. ¿Pero en realidad a quien benefician estos proyectos? Nosotros somos claros en decirlo: solo a las multinacionales mineras.



Las cifras desglosadas del consumo eléctrico nacional, dan cuenta de ello: el consumo Residencial es del 15%; el Comercial del 11%; el consumo de la Minería es del 33%; en las actividades Agrícolas es solo el 2%; el sector Industrial consume el 29%; y Otros no especificados consumen el 10 % (Instituto Nacional de Estadísticas, 2007). Queda claro entonces para quienes se debe producir más electricidad, es para las multinacionales mineras que hoy en Chile controlan el 75% de la producción y en donde el imperialismo norteamericano es dueño del 80%.



Peor aún, a partir de hoy, querrán convencernos de que una buena solución para paliar “nuestros problemas energéticos” es instalar energía nuclear, y que hay que empezar por lo primero, firmar un acuerdo de ayuda recíproca en el estudio de la energía nuclear con Estados Unidos, a eso vino Obama, a santificar un acuerdo con el gobierno- Piñera; pero para que quede claro que el “mérito” no es solo de Piñera, también se reunió con los ex presidentes de Chile, miembros de la Concertación, para felicitarlos por sus esfuerzos en la entrega del país a las multinacionales. Nosotros, un país que sufre de constantes terremotos y temblores y que no está exento de que en caso de implementar centrales nucleares ocurra lo mismo que está pasando en Japón, aparece firmando un acuerdo con el imperialismo yankee, como siempre, para dar muestras de que somos el alumno ejemplar de este modelo capitalista neoliberal; que somos los “mejores” del vecindario, los alumnos más aventajados… Simplemente vergonzoso.



Nosotros decimos desde Izquierda Comunista, no gracias, no necesitamos de esas energías para saltar al desarrollo económico. No necesitamos de ninguna firma con el imperialismo yankee, para avanzar en nuestro desarrollo energético, y por eso decimos fuera los yankees de América Latina (y extendemos nuestras voces para decir también: fuera las manos imperialistas de Libia). Porque ninguno de estos proyectos están al servicio de Chile y sus trabajadores, y porque todas estas nuevas fuentes de energía eléctrica son para el negociado de los grandes empresarios, que lucran con la depredación del medio ambiente, es que insistimos en plantear que Chile tiene su solución energética limpia y no contaminante, y estas son múltiples; por ejemplo: la aplicación de la mareomotriz, con 4000 km de costa; la implementación de la energía eólica, que puede ser instalada en un sinnúmero de lugares de nuestro país; el uso de la energía solar, que en el norte de Chile, nos permitiría cosechar altos niveles de radiación. Todas estas son fuentes limpias y que no depredan el medio ambiente.



Claro que no faltara el que diga que eso sale muy requeté contra caro y que no hay platas para llevarlo a cabo, a ese que sin duda será un miembro de la burguesía que no quieren que le toquen sus bolsillos o algún despistado, le debemos decir que solo el año pasado las mineras ganaron 14 mil millones dólares, y que con solo mil millones podríamos instalar un millón celdas solares (a $ 500.000 cada celda) en el norte de Chile, es decir energía limpia, pura, renovable e inagotable.



Pero también debemos ser claros, para nosotros el problema energético subsistirá, mientras este sistema económico, el Capitalismo, siga existiendo; la única forma de proteger el medio ambiente es mediante una planificación dirigida por los trabajadores y al servicio de toda la comunidad y que este en completa concordancia con el medio ambiente… y para ello la única solución es el Socialismo, con una economía planificada y bajo control de los Trabajadores. 

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