La cumbre de «paz» entre Trump y Putin fue una farsa
Por Carlos Sapir
El 15 de agosto, dos criminales de guerra se reunieron en Anchorage. Cada uno voló unas ocho horas para llegar a la ciudad de Alaska, intercambiar saludos, hablar brevemente en privado y luego celebrar una conferencia de prensa conjunta en la que no se dijo nada sustancial. Mientras estos dos imperialistas cenaban juntos y hacían visitas publicitarias triviales, los ucranianos siguen luchando en el frente contra la invasión, decididos a preservar su independencia.
Una gira publicitaria para una falsa paz
Con mucha fanfarria y pocas novedades, está claro que el propósito final de esta cumbre era que Putin y su séquito hicieran alarde de la influencia diplomática de Rusia y recitaran su pamplina egoísta sobre “desnazificar” a Ucrania con el sonriente respaldo del presidente estadounidense (por su parte, Trump probablemente espera que esto ayude a presionar a Zelensky para que haga más concesiones económicas).
Como innumerables imperialistas antes que ellos, desde Kissinger hasta Woodrow Wilson y Hitler, Trump y Putin se esfuerzan por presentarse como hombres de paz. Frente a una fachada que lleva el lema «En busca de la paz», Trump y Putin fingen que resuelven un problema espinoso, cuando en realidad trabajan para subyugar a Ucrania y allanar el camino para la próxima guerra de su elección.
Pero aunque Putin y sus aliados, como Viktor Orbán, intentan proyectar que la guerra prácticamente ha terminado, la realidad no es tan propicia. Incluso la ubicación de la cumbre lo delata: lugares más típicos y convenientes para las cumbres entre Estados Unidos y Rusia, como Islandia, Finlandia o las propias capitales de Estados Unidos y Rusia, están vetados debido a que los países europeos y Canadá han cerrado su espacio aéreo a los aviones rusos. Mientras tanto, los drones y ciberataques ucranianos han obligado a los aeropuertos de la Rusia europea a cerrar repetidamente durante largos periodos. Incluso en Anchorage, donde Trump desplegó la alfombra roja, cientos de manifestantes acudieron para recibir a Putin con un mar de banderas ucranianas.
Tras la cumbre, Trump se reunió con Zelenski y los líderes de la UE, a quienes les hizo promesas turbias y se unió a la exigencia de Putin de que Ucrania hiciera concesiones territoriales «a cambio de la paz». Por supuesto, esta propuesta es una farsa, ya que no habrá paz para los ucranianos mientras su país siga ocupado por una potencia imperialista.
Trump prometió vagamente compromisos de seguridad para Ucrania, respaldados por Estados Unidos, una frase que debería causar un déjà vu y escepticismo entre los ucranianos tras el procedimiento: después de todo, Estados Unidos, Rusia y Gran Bretaña prometieron lo mismo en 1994 cuando firmaron el Memorándum de Budapest, prometiendo garantizar la independencia de Ucrania a cambio de que este renunciara a su arsenal nuclear, en aquel entonces solo superado en tamaño por los de Estados Unidos y Rusia. Ucrania cumplió sus promesas; los estados imperialistas, no.
Ucrania merece la autodeterminación, los imperialistas de la OTAN le han dado una deuda
Desde el comienzo de la guerra, Ucrania ha buscado desesperadamente armarse para repeler la invasión. En lugar de dedicar su producción nacional al esfuerzo bélico y nacionalizar los activos rusos en Ucrania —que incluso ahora pertenecen a los aliados burgueses de Putin y les generan ganancias—, el gobierno ucraniano optó por complacer a los imperialistas de la OTAN y aceptar sus imposiciones de deuda, presupuestos de austeridad y producción con fines de lucro en nombre de la «responsabilidad fiscal». Casi inmediatamente después de asumir el cargo, Trump extorsionó aún más a Zelenski para obtener un acuerdo sobre recursos minerales.
Las deudas y los acuerdos comerciales unilaterales impuestos a Ucrania mientras se encuentra bajo la presión de una invasión son la esencia de la política imperialista. Son moralmente injustificables y deben ser denunciados. La cancelación de todas estas deudas y acuerdos que benefician a Estados Unidos, otros estados imperialistas y sus bancos apenas comenzaría a abordar las injusticias cometidas.
Al mismo tiempo, la solidaridad internacional entre trabajadores puede ayudar a mitigar las deficiencias que el gobierno neoliberal de Ucrania no aborda. Si bien son modestas por ahora, iniciativas como la actual recaudación de fondos para equipo médico de la Red de Solidaridad con Ucrania para el sindicato de enfermeras ucraniano Be Like Us brindan ayuda directa a los trabajadores que se oponen a la invasión rusa y construyen los lazos políticos internacionales necesarios para que los trabajadores ucranianos se enfrenten con decisión a su propio gobierno y puedan luchar por una independencia que realmente signifique algo para la clase trabajadora.
Como lo demostraron las protestas anticorrupción del mes pasado, los ucranianos, endurecidos por la guerra, están más que dispuestos a enfrentarse a su propio gobierno y forzar concesiones cuando éste intenta despojarlos de sus derechos.
Trump y Putin tienen el tiempo y los recursos para montar un espectáculo en Alaska y fingir que Ucrania no existe. Pero no han logrado que los ucranianos desaparezcan ni que abandonen la lucha que comenzó con marchas en las calles contra Poroshenko, el lacayo de Putin, y que continúa más de una década después en las trincheras, luchando contra los mercenarios rusos.
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¡Apoyemos a los trabajadores ucranianos!
La Red de Solidaridad con Ucrania , una red nacional de organizaciones y activistas individuales en Estados Unidos, ha iniciado una campaña de recaudación de fondos para recaudar 38.000 dólares para el sindicato de enfermeras ucraniano. El sindicato, ¡Sé Como Somos! (Будь як ми!), busca recaudar fondos para la compra de dos máquinas de diagnóstico médico en colaboración con la organización ucraniano-estadounidense sin fines de lucro Kryla. Esta campaña es una oportunidad crucial para construir una verdadera solidaridad entre trabajadores con la clase trabajadora ucraniana. En estos tiempos de guerra, mientras el imperialismo ruso bombardea despiadadamente a la población civil, nuestra solidaridad cobra una importancia crucial.
Recursos:
GoFundMe : https://www.gofundme.com/f/support-krylas-lifechanging-mission
¡Haga una donación para apoyar a las enfermeras ucranianas ! en el sitio de USN: https://www.ukrainesolidaritynetwork.us/donate-to-support-ukrainian-nurses/ Esto incluye literatura descargable y tarjetas para redes sociales.
