Luchas contra la dictadura del FRELIMO, el hambre y el desempleo, y los desafíos que se plantean
Por César Neto y J.G. Hata
Introducción
La prensa burguesa ha comentado sobre el fraude electoral y la ira de las masas. Este análisis es parcial porque la juventud, los trabajadores desempleados y los campesinos poco a poco van presentando sus demandas. El debate no es sólo con la prensa burguesa, sino también con el Partido Comunista Portugués, que defiende descaradamente el gobierno del FRELIMO.
El fraude, los asesinatos y el inicio de las movilizaciones
Las elecciones se llevaron a cabo el 9 de octubre; una semana después se conocieron los resultados dando la victoria al candidato oficial Daniel Chapo con 71% de los votos. La oposición cuestionó los resultados, incluida RENAMO, que siempre ha sido el mayor partido de la oposición y esta vez quedó en tercer lugar con una pobre votación. PODEMOS, el partido de Venancio Mondlane preparaba un recurso ante el Tribunal Constitucional contra el resultado electoral cuando un dirigente de ese partido y el abogado que preparaba la petición fueron asesinados.
Este asesinato estilo ejecución fue seguramente llevado a cabo por miembros de los Escuadrones de la Muerte que operan en el país contra la población pobre y también contra los opositores al régimen.
Las raíces profundas de la crisis
La riqueza mineral del país es inmensa. Carbón, oro, calizas, piedras preciosas (turmalina, aguamarina, cuarzo) y ahora el descubrimiento de una inmensa reserva de gas natural en Cabo Delgado.
Pero toda esta riqueza poco sirve al país. Tomemos un caso emblemático, la minería del carbón en Moatize, que fue explotada durante más de diez años por la Cía. Vale y vendida el año pasado a un grupo indio. El contrato inicial[1] preveía que 85% quedaría con la Vale, 10% con inversores locales y 5% para el Estado de Mozambique. En 2004, la Vale recibió en concesión un área de 23.780 hectáreas, aproximadamente 23 kilómetros de largo por 10 km de ancho. Numerosas exenciones fiscales y, por si todas las exenciones fiscales fueran poco, también existe la libre repatriación de lucros y dividendos, hasta 100%.
Para compensar todas estas regalías fiscales y la libre repatriación, el Estado mozambiqueño recibirá sólo 3% de los ingresos netos trimestrales de la mina.
El transporte de carbón se realizará a través de la línea ferroviaria del Sena, que estaba desactivada desde la guerra. La reactivación se realizará utilizando la infraestructura preexistente y, a cambio, la Vale permitirá a la población viajar una vez por semana en su tren de pasajeros.
Este modelo de expoliación o, para decirlo más claramente, este modelo de robo del carbón de Moatize se aplica a otras empresas que explotan los recursos naturales practicados por Kenmare, Rio Tinto, Total, Chevron, etc.
Fraudes, asesinatos y llamado a las calles
El fraude fue evidente e incluso ya es una tradición. En noviembre del año pasado, en las elecciones municipales, de las 65 ciudades en disputa, el FRELIMO ganó en 64. También hubo, en ese momento, muchas denuncias y movilizaciones, como ahora. Sin embargo, las movilizaciones que comenzaron el 21 de noviembre superaron todas las expectativas.
Miles de personas salen a las calles. Las primeras manifestaciones tuvieron incluso cierto humor. En las calles, la gente construyó tumbas de arena, clavó una cruz con el nombre de los políticos del FRELIMO y bailó alrededor de ella.
Aprovechando que la selección de fútbol disputaría un partido importante dentro del campeonato africano, el presidente Nyusi llamó a la población a apoyar a su equipo. El resultado fue el contrario: para mostrar el descontento, se produjeron grandes movilizaciones en los alrededores del estadio, que quedó vacío.
Los mercados y los comercios están cerrados porque los trabajadores no van a trabajar. La frontera con Sudáfrica está cerrada por camiones atravesados en ella y hay colas kilométricas de camiones detenidos, y sin circulación de mercaderías.
Las marchas son un río de gente gritando el nombre de Venancio. La Policía y el Ejército actúan con violencia; hasta el momento se han registrado 70 muertos, entre ellos 10 niños.
La policía y el ejército se dividen
Como dijimos anteriormente, la Policía y el Ejército actúan de manera muy violenta, lanzando bombas de gas, balas de goma, e incluso armas letales.
Contradictoriamente, existen numerosos videos de soldados de ambas fuerzas mostrando su simpatía con las movilizaciones. Incluso un sargento segundo de la Fuerza Aérea fue arrestado y está desaparecido.
Ante esta dualidad de fuerzas represivas, el movimiento de masas no ha perdonado la violencia policial. Son varios los muertos del lado de la represión. A uno lo mataron a pedradas, a otro le prendieron fuego a su casa, y el caso más fuerte ocurrió esta semana en Inhambane, en la pacata aldea de Mangungumete[2], “los manifestantes prendieron fuego a la comisaría y se apoderaron de las armas que había en su interior«[3]. La policía huyó aterrorizada. Uno de los policías disparó contra los manifestantes, fue neutralizado, y asesinado a golpes.
La lucha contra el fraude y los asesinatos comienzan a entrelazarse con otras demandas
Las manifestaciones no las decide ni las organiza la población. Son convocados por las redes sociales del propio Venancio y por sus seguidores. Así, la consigna principal y única es siempre: ¡Venancio, Venancio, Venancio!
Este control político está siendo superado lentamente por el movimiento. Los campesinos ocupan las carreteras por sus demandas. Empleados públicos de la STAE (Secretaría Técnica de Administración Electoral) denuncian salarios adeudados desde hace más de un año y se manifiestan. Médicos y personal de la salud salen a las calles con sus demandas. Esta semana el presidente Nyusi fue a los cuarteles para averiguar por qué los sargentos, cabos y soldados no reciben correctamente sus salarios.
La población comienza a plantear el tema de la inflación y del costo de vida, y más personas comienzan a saquear los supermercados, a tal punto que la Red Shoprite dijo que cerraría momentáneamente sus tiendas de mayor riesgo.
En un barrio, la gente detuvo un camión cargado de materiales escolares y retiró varias sillas para sus hijos que asistían a clases sentados en el suelo.
La burguesía y Venancio se asustan. Comienza el operativo desmonte de las movilizaciones
Los cincuenta años de gobierno del FRELIMO, los escuadrones de la muerte, el desempleo, la inflación, la baja esperanza de vida (veinte años menos que Brasil y Argentina), la altísima tasa de mortalidad infantil, las escuelas donde los niños asisten a clases sentados en el suelo, etc. son los motores de estos ríos de gente movilizándose en las calles.
La burguesía se asustó. Estados Unidos, Canadá, la Unión Europea y Suiza han expresado preocupación por la violencia.
Venancio Mondlane dijo en una de sus “lives”: “tuvimos que luchar contra los vándalos, porque nuestra revolución es pacífica”, y, “queremos construir un nuevo Mozambique para todos”. Y propone que los manifestantes paren sus coches y toquen la bocina en determinados horarios y que el que no tenga coche se quede en casa golpeando cacerolas.
Por primera vez, los manifestantes no acataron las órdenes
Al día siguiente de la orden de quedarse en casa, los manifestantes regresaron a las calles de las principales ciudades. En Maputo, bloquearon la avenida principal y construyeron una barricada que fue atropellada por un vehículo policial blindado.
La respuesta fue inmediata, varios vehículos policiales fueron incendiados y los policías salieron corriendo.
El juego aún no ha terminado, los próximos días serán decisivos. La gran pregunta es: ¿Mondlane seguirá movilizando o no? Hay grandes presiones para un acuerdo entre los tres candidatos presidenciales y ninguno de ellos ha dicho no a un acuerdo.
¿Quién es Venancio Mondlane?
Mondlane, dos veces diputado por la RENAMO, locutor de radio, pastor evangélico de la línea de la teoría de la prosperidad, admirador de Trump y Bolsonaro. En un homenaje a Bolsonaro dijo: “Un hombre de Dios y que es la esperanza… un hombre de familia, de valores, de principios que se solidifican y eso es una gran esperanza para el Brasil”[4].
En julio de este año, mientras viajaba por Europa, se reunió en Portugal con Diogo Amorim, líder del partido de extrema derecha CHEGA. Este partido tiene como una de sus principales banderas la lucha contra la emigración. Según ellos, es necesario “limpiar Portugal” de inmigrantes, incluidos africanos y mozambiqueños.
En una de sus tantas “lives” durante este período, dijo textualmente que quiere un Mozambique para todos y menciona entre quienes ayudarán para eso a las transnacionales Total y Chevron, que son empresas empeñadas en sacar gas de Cabo Delgado, el más grande del continente africano.
La táctica electoral de Mondlane
Venâncio hizo una lectura correcta del bipartidismo mozambiqueño. Las masas ya no aguantan más al Frelimo y a Renamo como organizaciones hegemónicas durante cincuenta años, responsables en diversos grados del descalabro del país, y es necesario presentar un nuevo proyecto. Mondlane, que fue elegido para dos mandatos como diputado por RENAMO, rompió con ese partido y buscó distanciarse creando inicialmente la CAD (Coalición Alianza Democrática), y luego afiliándose a Podemos (Partido Optimista por el Desarrollo de Mozambique).
Así, desvinculándose del bipartidismo, comenzó a hacer un discurso antisistema, mezclado con elementos religiosos, con énfasis en la posibilidad de la prosperidad, defensa de empresarios, empleados públicos y hasta policías. Un discurso siempre dirigido a los jóvenes que están a la vanguardia de las manifestaciones.
El Partido Comunista Portugués con la dictadura y contra las movilizaciones
Los países africanos del PALOP (Países Africanos de Lengua Oficial Portuguesa), Angola, Cabo Verde, Guinea-Bissau, Mozambique y Santo Tomé y Príncipe, ahora también Guinea Ecuatorial, mantienen estrechas relaciones políticas, culturales y económicas con Portugal. Una parte importante de la diáspora de estos países se encuentra en tierras lusitanas.
Por tanto, las declaraciones del Partido Comunista Portugués son de gran importancia en estos países, y la intervención en el Parlamento Europeo hecha por el diputado João Oliveira no pasó desapercibida en los países del PALOP, especialmente en Mozambique y Angola.
João Oliveira afirma que “las elecciones generales en Mozambique se desarrollaron, en general, de forma calma y pacífica”[5], incluso después del asesinato de Paulo Guambe y Elvino Dias. Considerando que las elecciones se desarrollaron con normalidad y sin denunciar los históricos fraudes cometido por el FRELIMO, João Oliveira sólo pudo condenar las manifestaciones, defender los bienes privados y de las instituciones del régimen bonapartista. Literalmente, afirmó: “Los posteriores actos de violencia provocaron decenas de muertos y centenares de heridos, además de vandalismo, destrucción y saqueo de bienes públicos y privados, ataques y amenazas a los ciudadanos”.
Y para que no queden dudas sobre el apoyo al gobierno bonapartista de Nyusi y sus escuadrones de la muerte, Oliveira reconoce el “normal funcionamiento de las instituciones democráticas mozambiqueñas”.
De hecho, esta no es la primera vez que el Partido Comunista Portugués se pone del lado de las dictaduras. Cuando el gobierno de João Lourenço ordenó el arresto de jóvenes angoleños que estaban estudiando un libro sobre métodos no violentos de lucha democrática, el PCP se puso del lado de la dictadura del MPLA contra el movimiento juvenil conocido como 15+2.
Un proceso revolucionario en peligro
Tomando la famosa frase de Lenin: “los de arriba ya no podían gobernar como antes y los de abajo ya no se dejaban gobernar como antes”[6], podemos decir que Mozambique vive una situación revolucionaria. El hecho de que estemos viviendo esta situación no significa que estemos en un camino seguro hacia la revolución. Es posible desviar el camino, como dijo el propio Lenin.
Y no tenemos dudas de que el proyecto de Venancio Mondlane va encaminado a desviar el proceso revolucionario hacia la institucionalización de la lucha.
Mondlane sólo logra esta hazaña de desviar la revolución porque las masas mozambiqueñas no construyeron previamente dos herramientas fundamentales.
Primero, los organismos de doble poder. Aquellos que a través de sus luchas cuestionan y no reconocen las instituciones del Estado burgués y crean un poder paralelo. Un poder paralelo en sus más diferentes formatos y de acuerdo con el momento de la pelea. Por ejemplo, cuando las fuerzas represivas ordenan la represión, el comité de soldados se reúne y se niega organizadamente a reprimir. Este sentimiento ya existe en parte de la Policía y del Ejército, como dijimos arriba, pero todo ha sido en el terreno de defender a Venancio y no de luchar por un país anticapitalista, antiimperialista, al servicio de los trabajadores (empleados o no), de los jóvenes y de los campesinos.
La segunda herramienta es la existencia de una dirección política con un programa revolucionario. Una organización que dispute en las luchas qué dirección les daremos a estas luchas. Una dirección que ponga a la orden del día cuestiones claves para el futuro del país. Temas como el no pago de la deuda externa, la nacionalización de la explotación de recursos minerales y la reforma agraria.
Sin la disputa con Mondlane y sus amigos empresarios –como él mismo dijo en sus lives– la clase trabajadora, los jóvenes y los campesinos sólo verán el cambio de gobierno, y esto, cuando tengan fuerzas suficientes para cambios profundos.
La tarea central e inmediata es organizar los organismos de poder dual y la construcción de la herramienta política.
[1] Mozambique, pobreza extrema, extractivismo mineral y recolonización, en: https://www.afropress.com/mocambique-pobreza-extrema-e-recolonizacao/
[2] Dos heridos, un policía muerto y quemaron la sede del partido Frelimo en Mangungumete, en: https://www.youtube.com/watch?v=_VcYUmlf1iI
[3] Violencia poselectoral lleva a la paralización de la multinacional Sasol, en Inhambane, en: https://integritymagazine.co.mz/arquivos/35157
[4] Lo que explica la crisis en Mozambique, en medio de denuncias de fraude electoral y protestas, en: https://www.youtube.com/watch?v=7D-2qOmlLdY
[5] Intervención de João Oliveira en el Parlamento Europeo, en: https://www.pcp.pt/solidariedade-com-povo-mocambicano-respeito-pela-sua-soberania
[6] La bancarrota de la II Internacional, p. 102, en: (www.marxists.org/espanol/lenin/obras/oe12/lenin-obrasescogidas05-12.pdf).
Traducción: Natalia Estrada.