La reciente jornada de lucha de la CNTE

Por Profesor Francisco Bravo, integrante de la CNUN – Comisión Nacional Única de Negociación de la CNTE
Ha quedado claro que los gobiernos de la auto denominada “Cuarta Transformación” son tan capitalistas como sus antecesores, sólo que se han construido una imagen de “progresistas” mediante políticas que administran la pobreza, como los programas sociales, generando al mismo tiempo, una red social corporativa que les garantiza votos en los procesos electorales. De igual forma se han dotado de un discurso anti neoliberal y de condena a los conservadores. Pero paradójicamente gobiernan con políticas neoliberales. No han tocado ni un milímetro del sistema económico que imperaba y aún hoy tenemos. De tal forma que los ricos se han hecho más ricos.
Tal es el caso de los dueños de las AFORES o Fondos privados de pensiones –que también son dueños de bancos, televisoras, cadenas comerciales, etc.– quienes han ganado grandes fortunas de la manera más cómoda y descarada. Según datos de la Comisión del Sistema del Ahorro para el Retiro (CONSAR), en poco más de una década han obtenido alrededor de 134 mil millones de pesos (7 mil millones de dólares), y en los primeros cuatro meses de este 2025, tuvieron ganancias históricas de 4.702 millones de pesos (247 millones de dólares).
En ese contexto y en seguimiento a un Plan de acción que se fue construyendo a lo largo de diversas Asambleas Nacionales Representativas, el 15 de mayo la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE), inició una Huelga Nacional e instaló un plantón en el Zócalo de la Ciudad de México con más de 30 mil profesoras y profesores de varios estados de la República, mayoritariamente de Oaxaca, enarbolando principalmente las siguientes demandas: a) Abrogación de la Ley del ISSSTE, impuesta por Felipe Calderón en 2007, que eliminó el régimen solidario de Jubilaciones, b) Abrogación a la Reforma Educativa, particularmente lo relacionado con la excepción laboral, c) Incremento salarial.
El regreso del Sistema Solidario de Pensiones ha sido la demanda más posicionada y sentida por los maestros y maestras de base, en razón de que cerca del 80% se encuentra bajo el régimen de cuentas individuales de las AFORES, que en los hechos significa, eliminación del derecho a la jubilación, a cambio de un régimen de retiro.
Es importante señalar que la demanda de abrogación de la Ley del ISSSTE, se hizo desde 2018, en el inicio del sexenio de López Obrador, es decir, llevamos 7 años de haberlo planteado por primera vez. La actual presidenta prometió abrogarla durante su campaña electoral como candidata. El argumento del gobierno pasado para no hacerlo, fue que no tenían mayoría calificada en el Congreso. Ahora el argumento es que “no hay dinero”. Es decir, la actual movilización magisterial es producto de la cerrazón y oídos sordos del gobierno, lo que demuestra que, en este país, si no sales a las calles, no se visibilizan las problemáticas sin importar las siglas del partido que esté en el poder.
Durante 23 días que duró la Huelga, hubieron diversas movilizaciones centradas principalmente en la Ciudad de México como: marchas, tomas de edificios donde están las AFORES, “metro popular” –liberación del acceso al transporte en el metro–, liberación de casetas de cobro de peaje en las carreteras, toma del Aeropuerto, etc. Pero también hubo numerosas acciones similares en varios estados del país como Quintana Roo, Yucatán, Chihuahua, Tamaulipas y otros. Cabe destacar que en algunos de estas entidades no se habían visto movilizaciones desde mucho tiempo.
Durante las protestas, se llevaron a cabo varias reuniones con la Secretaria de Gobernación, el Secretario de Educación Pública y el Director General del ISSSTE, quienes el 28 de mayo, entregaron a la Comisión Nacional Única de Negociación de la CNTE un “documento-respuesta” de cinco puntos que no resolvió las demandas. En el punto uno, ofrecieron el “congelamiento” de los años de edad y disminuir un año, cada tres. Esto ofrece cierto beneficio sólo para el 26% de docentes ubicados en el Décimo Transitorio (es decir, los de mayor antigüedad). Mientras que para el otro 74% ubicado en cuentas individuales, no hay nada, es decir, es una respuesta diferenciada y discriminatoria, que fue y es inadmisible porque divide y confronta internamente al magisterio.
El ofrecimiento de que a las profesoras y profesores con cuentas individuales, serían apoyados por el Fondo de Pensiones para el Bienestar, es muy confuso porque su existencia a largo plazo no está garantizada, en tanto sus recursos provienen de fuentes circunstanciales como cuentas no reclamadas y aportaciones “solidarias del Estado”.
Los otros puntos tienen que ver con aspectos que ya se habían anunciado o ya se llevan a cabo, como la desaparición de Unidad del Sistema para la Carrera de las Maestras y Maestros, USICAMM y las comisiones tripartitas. De igual forma ofrecieron la formación de un “Colectivo Interdisciplinario”, cuya agenda ya estaba decidida en lo general en el documento, con objetivos acotados que no contemplaban la abrogación de la Ley del ISSSTE.
El rechazo a la propuesta gubernamental fue decidido unánimemente por decenas de miles de docentes de la CNTE mediante una masiva consulta. Los maestros se convencieron que los hechos y el discurso de este gobierno son contradictorios. Así como también entendieron que hay guerras que no se ganan en una sola batalla. El 31 de mayo, y después de largas discusiones tanto a nivel estatal como en la Asamblea Nacional Representativa, se decidió terminar esta fase de lucha y continuarla en otro escenario. Se dio por terminada la Huelga Nacional y el Plantón del Zócalo.
Sin embargo, es importante decir, que bajo el principio de que las bases definen en cada contingente movilizado y el carácter de que somos una Coordinadora y no somos una Central, en el caso de los compañeros y compañeras de las dos secciones del estado de Zacatecas –quienes recientemente derrotaron a los “charros” (burócratas sindicales) en las elecciones de Comités Directivos–, decidieron continuar el paro indefinido de labores, con demandas principalmente de carácter local, sin que ello implique ruptura o desunión con la CNTE. Otros estados como Yucatán, no tienen una afiliación clara en la CNTE, por tanto sus decisiones no siempre coincidieron con los tiempos de la Coordinadora.
Al respecto, es importante que la CNTE discuta y diseñe con claridad una política de incorporación de las secciones o grupos emergentes que tienen las mismas demandas.
Aunque no logramos que se abrogara la Ley del ISSSTE de 2007, para las y los docentes de la Coordinadora quedó claro que la lucha va a continuar y que logramos una victoria política en el escenario de la lucha de clases. He aquí algunas de las razones de tal afirmación:
1. La CNTE puso en evidencia el verdadero carácter de este gobierno, no sólo ante los ojos del magisterio, sino de otros sectores de trabajadores, demostrando que el gobierno está del lado de los poderosos a quienes no quiere perjudicar ni estar en conflicto.
2. La Coordinadora ha vuelto a demostrar su gran capacidad de organización y movilización, al establecer y sostener un plantón de más de 30 mil docentes durante más de tres semanas. Se potenciaron condiciones para que la lucha se de en otras condiciones de fuerza, agrupando a otros trabajadores al Servicio del Estado.
3. Las movilizaciones han sido la mejor escuela para cientos de jóvenes maestros y maestras en perspectiva de cambios generacionales y generación de nuevos cuadros. De igual forma ha permitido el fortalecimiento de la organización desde la base.
4. La CNTE sigue demostrando que es una organización independiente del gobierno y los partidos políticos del régimen y que no se sujeta al poder de Estado y su clase dominante. La CNTE es y seguirá siendo una organización de la clase trabajadora de este país, sostenida y construida desde abajo por cientos de miles de maestros y maestras.
5. La Coordinadora ha puesto en la agenda nacional el problema de las jubilaciones y muestra que no deben “naturalizarse” las injusticias y la pérdida de derechos de la clase trabajadora.
6. Se sigue demostrando la protección y el cobijo de estos gobiernos, eufemísticamente autollamados de “izquierda”, hacia el “charrismo” sindical, en un esquema de pragmatismo electorero que mantiene y refuerza la antidemocracia sindical.
Lo anterior tampoco nos ubica en falsos triunfalismos, sino reconocer lo alcanzado, al mismo tiempo que también reconocemos autocríticamente lo que es necesario corregir y hacer.