El PSTU y la LIT-CI esta en Belém denunciando la farsa de la COP 30 y que la crisis climática es capitalista.
La COP 30: un reflejo del capitalismo que perpetúa la crisis ambiental y la opresión de los pueblos.
Desde el día 10 de noviembre se lleva a cabo en Belém (PA), región amazónica en Brasil, la 30ª Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático de 2025, la llamada COP 30. La política de la ONU, junto al gobierno brasileño y otros Estados, de realizar el evento en la región amazónica, fuera de las grandes megalópolis, buscaba conferir un barniz “democrático” a una conferencia que, al igual que las anteriores, sirve únicamente como un teatro para mostrar una supuesta preocupación y un falso empeño ante la crisis climática que el capitalismo arrastra al planeta a pasos agigantados.
Lo que se está viendo en la capital de Pará, sin embargo, es justamente lo contrario: la segregación de los pueblos originarios, activistas y movimientos sociales, mientras los representantes del poder y los grandes capitalistas se atrincheran en negociaciones oscuras, repletas de lobbies del agronegocio, de las petroleras extranjeras y mineras. La ciudad ha sido militarizada a través de una GLO (Garantía de la Ley y del Orden), medida del Gobierno Lula que pone la seguridad en manos de las Fuerzas Armadas, imponiendo un verdadero Estado de excepción en la zona.
Los espacios dedicados a las negociaciones “oficiales” fueron confinados en un espacio llamado “Blue Zone” (Zona Azul), protegidos por un fuerte esquema de seguridad. Lo absurdo llega al punto de que el propio agronegocio, uno de los principales responsables de la deforestación y genocidio de los pueblos originarios, cuente con su propio espacio, denominado “Agrizone”, ideado por la CNA (Confederación Nacional de la Agricultura y Ganadería) y financiado por agricultores y por el Estado.
Lee también
“Los madereros y los mineros están destruyendo todo lo que hay de bosque”, afirma el cacique Raoni
Resistencia y movilización
Paralela a la COP 30, sin embargo, ocurre la Cumbre de los Pueblos, evento autónomo que reúne a pueblos originarios, movimientos sociales y activistas de varios países del mundo. Espacio en el que el PSTU y la Liga Internacional de los Trabajadores (LIT-QI), vienen actuando activamente, junto a la CSP-Conlutas, denunciando la farsa de la COP 30, así como falsas alternativas, como el “capitalismo verde” y demás propuestas que no colocan al capitalismo como el centro del problema de la catástrofe climática que se profundiza cada día. La delegación del PSTU y de la LIT-QI cuenta con, entre otras importantes liderazgos, el seringueiro Osmarino Amâncio, sucesor de Chico Mendes en las grandes luchas en defensa de la selva y del medio ambiente, contra el agroextractivismo asesino y depredador.
Lee también
Osmarino Amâncio: “Para nosotros, pueblos del bosque, el capitalismo verde es una tragedia”
En este día 11, pueblos originarios y movimientos sociales que participaban en la Marcha Global por la Salud y el Clima ocuparon la Zona Azul, denunciando el impacto ambiental y los ataques a los territorios indígenas, y fueron duramente reprimidos por las fuerzas de seguridad. Las escenas de los indígenas siendo golpeados en un lugar que, supuestamente, sería de discusión en defensa de sus intereses, expusieron la farsa y el cinismo de esta conferencia. Tras el episodio, la ONU envió una carta al gobierno brasileño exigiendo más “seguridad” en el lugar, a lo que fueron prontamente atendidos.
Ya al día siguiente, ocurrió una gran “barqueada”, abriendo oficialmente las actividades de la Cumbre de los Pueblos, donde casi 200 embarcaciones navegaron por el Río Guamá. La militancia del PSTU y de la LIT-QI participó en el barco dedicado a la denuncia del genocidio del pueblo palestino y en defensa de una Palestina libre, del río al mar. Los activistas exigen el embargo energético al Estado de Israel, incluyendo la prohibición de la venta del petróleo que, hoy, sale de Brasil para abastecer los tanques que asesinan palestinos en la Franja de Gaza.
El mismo día 12, tuvo lugar, en la sede campestre del Sindicato de Trabajadores de la Construcción Civil de Belém (afiliado a la CSP-Conlutas) una plenaria de acogida a los activistas y a los pueblos originarios, quilombolas y ribereños que llegaban a las actividades de la Cumbre de los Pueblos. Los trabajadores de la Construcción Civil protagonizaron una fuerte huelga en septiembre que, durante dos semanas, paralizó las obras, incluidas las de la COP 30, denunciando la marcada desigualdad social en la ciudad y teniendo repercusión internacional.
Ya en este día 13, el PSTU participó en el panel “La COP 30 es un mecanismo del capital para legitimar la destrucción de la Amazonía”, organizado por la CSP-Conlutas. El debate contó con la participación de Osmarino, además de Raquel Tremembé, líder indígena de Maranhão que fue vicepresidenta en la chapa presidencial del PSTU encabezada por Vera en las últimas elecciones, entre otros representantes de pueblos originarios y activistas.
“Movimientos sociales y auto-organización: ¿cuál es la salida climática?” fue otro panel, ya en este día 14, que contó con la participación de Jeferson Choma, de Opinión Socialista y del canal Ecología Marxista (mira el panel aquí). En este día 15 ocurre una gran Marcha Unitaria por el Clima, cerrando oficialmente las actividades de la Cumbre de los Pueblos.
La participación del PSTU y de la LIT-QI
La actuación de la militancia del PSTU comenzó mucho antes del inicio de la COP 30. La huelga que sacudió Belém en septiembre y puso el evento en jaque, denunciando la superexplotación de los trabajadores de la Construcción Civil, fue encabezada por militantes del partido y de la CSP-Conlutas.
En la Cumbre de los Pueblos, el PSTU levantó la bandera de que “la catástrofe ambiental es capitalista” y que, por lo tanto, “la salida es revolucionaria y socialista”, uniendo a trabajadores y obreros con pueblos originarios, quilombolas y ribereños. Además, el partido defiende al pueblo palestino y la necesidad de la lucha internacional de la clase trabajadora y de los pueblos oprimidos contra el capital para enfrentar la barbarie capitalista.
Con una delegación compuesta por militantes de la ciudad y de varias partes del país, el PSTU difundió una publicación especial para la COP 30 (descarga aquí), haciendo todo el debate sobre las raíces de la crisis ambiental y climática, el papel del gobierno Lula en el profundización de este proceso, y proponiendo la única salida posible: el socialismo. La Juventud del partido, a través del Colectivo Rebeldía, realizó una reunión de presentación del PSTU a una nueva generación que se ve cada vez más sin perspectivas ante el profundización de la crisis climática
El próximo domingo se llevará a cabo una actividad general de presentación del PSTU a los activistas en Belém.




