Buenos Aires está ocupada militarmente, Treinta mil soldados custodian la reunión del G20, la reunión de los principales dirigentes del capitalismo mundial. La imagen ilustra bien la situación política: solo con el apoyo de una fuerza militar brutal esos gobernantes pueden reunirse. Ellos saben que son odiados por la mayoría de los trabajadores y jóvenes del mundo.
Trump, la verdadera cara fea del imperialismo, ya en su primer día de gobierno tuvo que enfrentar una gigantesca movilización de mujeres en su contra. Adonde sea que vaya, Trump provoca enormes movilizaciones de repudio. Una parte importante de la fuerza represiva en Buenos Aires es para evitar movilizaciones mayores y para defender a Trump.
Macron, el presidente francés elegido hace menos de dos años, es repudiado por el 75% de los franceses, después de los planes económicos aplicados. Grandes movilizaciones contra el aumento de los combustibles sacuden a Francia en este momento.
Macri, el anfitrión del G 20, ya tuvo que enfrentar cuatro huelgas generales y es repudiado por el 70% de los argentinos. Aplicó los planes dictados por el imperialismo, y ahora quiere atacar aún más a los trabajadores. Reprime las huelgas y las movilizaciones. Ahora manteniendo preso a Daniel Ruiz, uno de los organizadores de esta movilización contra el G20, y persiguiendo a Sebastián Romero por luchar contra sus planes. Esa semana fueron asesinados, por la policía, dos luchadores populares.
Temer, es el presidente, al final de su mandato, más odiado de toda la historia de Brasil. El 92% de los brasileños no confían en él. Impuso una reforma laboral brutal para precarizar los derechos de los trabajadores. Quería traer a la reunión a Bolsonaro, el nuevo presidente electo (con el apoyo de sólo el 30% de la población) de ultraderecha, racista, xenófobo, machista. Bolsonaro, elegido por haber capitalizado la bronca general del pueblo contra el PT, va aplicar un plan neoliberal aún más duro, bajos las órdenes de Trump, y amenaza hacer retroceder al país hacia una dictadura.
Putin y Xi Jinping representantes de las burguesías rusa y china tienen enfrentamientos puntuales con Trump, pero tienen completo acuerdo con los planes neoliberales y con el apoyo a dictaduras sanguinarias.
Esos gobernantes se reúnen para definir planes neoliberales durísimos contra nuestros pueblos, privatizando las empresas estatales que restan. El imperialismo saquea nuestros países. La reunión del G20 es para eso.
El mundo precisa ver también la movilización contra el G20.
La atención del mundo, en estos días, estará enfocada en Buenos Aires. Y es importante que se vea también la otra escena, la de una gran movilización contra esos gobernantes. Habrá una marcha unitaria, internacionalista, juntando centrales sindicales, movimientos y partidos de izquierda latinoamericanos.
Es preciso mostrar al mundo que si ellos se unen, nosotros también nos unimos en una gran lucha contra los planes neoliberales y los gobiernos que los aplican. Por eso invitamos a todos los trabajadores a sumarse a la marcha del día 30, como parte de la Confluencia contra el G20. Al mismo tiempo queremos decir a todos los activistas que nos escuchan, que luchamos unitariamente, pero queremos debatir las diferentes visiones entre los que luchan contra el G20. Los trabajadores y jóvenes precisamos aprender de nuestras victorias y también de nuestras derrotas.
La elección de Bolsonaro en Brasil sería imposible si los trabajadores no hubiesen roto duramente con el PT, que aplicó los mismos planes neoliberales y tuvo la misma corrupción de los gobiernos burgueses anteriores. Macri sólo se eligió porque el gobierno Kirchner fue un desastre por los mismos planes neoliberales. Las dictaduras de Maduro en Venezuela y de Ortega en Nicaragua, son apoyadas pro buena parte de la “izquierda” latinoamericana, a pesar de que aplican esos mismos planes y reprimen duramente a los trabajadores.
Nuestros partidos revolucionarios están en esta lucha conjunta, pero no aceptan la alternativa de los partidos electoralistas. Cuando quedan en la “oposición” partidos como el PT en Brasil o el kirchnerismo (junto a la burocracia sindical) en Argentina, frenan las luchas y encaminan todo para las elecciones, con la esperanza de volver a ser gobierno y hacer las mismas cosas. Solo la lucha directa de los trabajadores puede cambiar nuestros países. La salida que proponemos es la revolución y el socialismo. Solo los trabajadores en el poder estatal pueden romper con la miseria, el saqueo y la dominación imperialista, logando la Segunda y definitiva independencia de América Latina.
Por eso invitamos a todos los activistas a discutir con nosotros la situación brasileña, el 29 a las 14 horas en la Tienda de la CSP Conlutas en la Cúpula Alternativa (Plaza Congreso). Y también los queremos invitar a la mesa que haremos para defender la libertad de Daniel Ruiz, también en la Tienda de la Conlutas, el mismo 29 a las 17 horas.
¡Fuera el G20! Fuera el FMI!
¡Fuera Macri!
¡Viva la lucha directa de los trabajadores!
¡Libertad para Daniel Ruiz! Por el fin de la persecución a Sebastián Romero! Basta de asesinato de luchadores!
¡Por gobiernos de los trabajadores y el pueblo pobre!
Liga Internacional de los Trabajadores-Cuarta Internacional
PSTU-Argentina
PSTU-Brasil
MIT-Chile
