Costa Rica: Este 8M salimos a enfrentar los ataques del gobierno contra las mujeres trabajadoras
En Costa Rica, hemos identificado un retroceso general en el movimiento de mujeres en el país producto de una disminución del movimiento internacional de lucha por los derechos de las mujeres, pero además por la derrota del PAC y al progresismo en general en el anterior proceso electoral, lo que se puede mezclar con una segregación general del movimiento de mujeres del país, ya que las organizaciones de izquierda y colectivos feministas que se fortalecieron en el periodo anterior se han visto reducidos.
Por PT – Costa Rica
Con el ascenso de Rodrigo Chaves al poder, el movimiento de mujeres en general se encuentra a la defensiva, producto del acuerdo de Chaves con las iglesias y sectores conservadores para atacar la norma técnica para el aborto terapéutico, así como la legitimación de la violencia machista en la propia figura del mandatario, que concretó en un discurso de defensa de su actuación en el Banco Mundial incluso poniendo a la presidencia del INAMU a defenderlo antes las acusaciones públicas.
El gobierno no solo no tiene ninguna política concreta para garantizar acceso a los trabajos dignos para las mujeres, si no que impulsa leyes como la Ley de jornadas de 4-3 (aumento a jornadas de 13 horas por 4 días a la semana) que coloca en una situación de vulnerabilidad y posible pérdida de empleos a las mujeres trabajadoras con obligaciones de cuido, pero además pone en vigencia la ley de empleo público con una reglamentación de afecta a las trabajadoras públicas, a las que también les tiene el salario congelado.
También el gobierno niega el acceso a la tierra a las mujeres campesinas e indígenas, mientras enfila ataques las migrantes que llegan al país a buscar refugio huyendo de la pobreza y las dictaduras de la región.
El lanzamiento de decenas de miles de mujeres a la pobreza y el desempleo, ha generado también un aumento muy importante de los casos de violencia contra las mujeres y feminicidios, con un aumento generalizado de la violencia doméstica y las agresiones sexuales.
Por su parte se ha notado un mayor componente de mujeres asesinadas en los enfrentamientos de las bandas narcos, quienes han las usado como carne de cañón en los frentes de narco menudeo y disputa de territorios.
La lenta recuperación de la economía coloca a las mujeres de la clase trabajadora en una situación de desempleo desesperante sufriente un enorme retroceso en su participación del mercado laboral, siendo obligadas a replegarse a las labores de cuido y al desempleo, o en su defecto ciento de miles deben soportar condiciones de informalidad y precariedad laboral.
Mientras tanto el aumento de la inflación durante el año anterior afectó mucho más a las mujeres que en promedio reciben salarios mucho más bajos que los hombres, situación que se acentúa cuando son mujeres jóvenes o extranjeras.
Las mujeres jóvenes también han visto muy afectadas sus condiciones de vida, no solo enfrentando un alto grado de violencia en los espacios públicos y privados, si no que a nivel económico el capitalismo las coloca como parte de los sectores que más sufren desempleo y precarización laboral, mientras el sistema educativo sufre un desfinanciamiento que les impide acceder a las universidades públicas y en muchos casos ni terminar la educación secundaria.
En enero de 2023 el desempleo en personas menores de 25 años afectaba a un 25, 2% de hombres y un 39,6 % en mujeres.
Por su parte, desde la asamblea legislativa se han planteado proyectos de Ley que van en contra del derecho de las mujeres a decidir sobre sus propios cuerpos, y más bien colocando cercos legales a la posibilidad de acceder incluso al aborto terapéutico, como lo es el proyecto 21.239, Ley de derechos del ser humano en gestación que a finales de enero 35 diputados le dieron un lazo de 4 años para tenerlo en agenda, proyecto impulsado por las iglesias y sectores de médicos antiaborto, o el caso del proyecto de la diputada Johana Obando, del Partido Liberal Progresista (PLP) sobre la posibilidad de realizar adopciones desde el vientre materno, que incluso abre la puerta a la legalización de los vientres de alquiler.
A pesar de que el Gobierno de Rodrigo Chaves tiene un enorme apoyo popular este 8M debemos hacer un esfuerzo para que explicar las razones por las que el gobierno de Rodrigo Chaves es un enemigo de las mujeres pobres y trabajadoras, y que tenemos muchos motivos para salir a enfrentar al gobierno.
Pero además ser contundentes en discutir la necesidad de organizar a las mujeres y los hombres de la clase trabajadora para enfrentar al gobierno que ataca las condiciones de vida de nuestra clase para garantizar las riquezas de los grandes empresarios, pero además al mismo sistema que garantiza la explotación y la miseria para las mayorías.
Debemos colocar la necesidad de organizar la lucha en las empresas como lo hacen las mujeres de Dos Pinos y las de Selime, pero además de organizar la lucha por tierra y vivienda como lo hacen las mujeres campesinas de la Alianza y las recuperaciones indígenas, pero que esos esfuerzos son solo el inicio, falta organizar el partido revolucionario para organizar la lucha por la revolución socialista como única alternativa para garantizar el respeto a la dignidad de las mujeres de la clase trabajara y acabar con la pobreza, el desempleo y la violencia.
