Paralizaciones y protestas demuestran la insatisfacción y que es posible una gran Huelga General para derrotar a Temer y a las reformas
El 30 de junio, los trabajadores brasileños dieron, otra vez, una gran demostración de lucha en contra de las reformas del gobierno de Temer, que amenazan la jubilación y los derechos laborales. Fue un día con carácter de Huelga General, con manifestaciones en todos los Estados del país, incluyendo al Distrito Federal.
Por CSP-Conlutas
A pesar de las diferencias entre las centrales sindicales, sobre el nombre que se daría al día de movilización, si Huelga General o Día de lucha, las manifestaciones que tomaron cuenta del país confirman que los trabajadores están dispuestos a la lucha para derrotar las reformas que atacan los derechos y a los corruptos del gobierno de Temer y del Congreso.
Fueron huelgas, paralizaciones, cortes de calles y avenidas, marchas y manifestaciones en las capitales y principales ciudades del país, como fue ampliamente divulgado por la prensa a lo largo del día. Fueron diversos sectores que salieron a la lucha, como metalúrgicos, petroleros, bancarios, trabajadores de Correos, construcción civil, profesores, servidores públicos, entre otros.
Para el dirigente de la CSP-Conlutas, Atnágoras Lopes, el día 30 representó no solo un mensaje de la clase para el gobierno y el Congreso de corruptos sino que fue, también, para los dirigentes sindicales. “La corrupción es la muerte de nuestros hijos en los puestos de salud, es la falta de empleo. Nuestra tarea, como dirigentes, es intensificar cada vez más la movilización y construir una gran Huelga General en este país, derrocar a Temer y a los corruptos del Congreso”.
Para el dirigente, ninguna central sindical tiene el derecho de apuntar posibles negociaciones entre trabajadores y el gobierno, toda vez que la base sigue indignada por los ataques a los trabajadores y el retiro de derechos.
“Este día 30 tiene el signo de una Huelga General y pavimenta nuestro camino rumbo a la victoria de nuestra clase. Necesitamos la unidad en la lucha. Cuando el trabajador se junta, podemos transformar nuestra realidad, y aquel que produce, el trabajador, puede gobernar con sus propias manos el país”, concluyó.
El peso de la disposición de lucha de los trabajadores y el rechazo a las negociaciones con el gobierno también fueron destacadas en las palabras del dirigente de la CSP-Conlutas, Luiz Carlos Prates, Mancha, en el acto unificado de las centrales sindicales frente de la Superintendencia Regional de Trabajo (SP), en la capital paulista, en la mañana del 30.
“Para nosotros, de la CSP-Conlutas, no hay espacio para negociaciones entre trabajador con este gobierno moribundo, que no tiene como continuar en el poder. Debemos seguir con la movilización de los trabajadores. Aquellos que pensaban que el 30 sería débil, están viendo las noticias que llegan de todo el país. Las centrales que vacilaron en el último momento en la construcción de la Huelga General, cometieron una gran equivocación. Hoy se concreta un nuevo mensaje para el gobierno y para todas las centrales sindicales: no podemos negociar los derechos de los trabajadores con el gobierno y que ninguna medida provisional, de parte de Temer, va a atender nuestros intereses. Necesitamos avanzar en nuestra lucha”, afirmó Mancha.
Traducción Laura Sánchez
