La injusticia del despido condujo a la huelga de hambre
Turquía ha tenido dificultades por muchos años, pero las peores experiencias han ocurrido con el Partido AK y el régimen de Tayyip Erdogan. El país fue testigo de más de un levantamiento y muchas personas perdieron sus vidas luchando contra la dictadura de Erdogan.
Por: Canan Sagar
La ley ha sido cambiada
El tratamiento arbitrario es aplicado en muchas partes del país; los periodistas son encarcelados, los trabajadores son dejados en paro, el asalto sexual y el abuso han aumentado, las mujeres son diariamente matadas, el hambre se ha elevado. Pero el gobierno no acepta la realidad de sus fracasos y con fraude ganó el voto para una nueva presidencia.
El estado de emergencia declarado por Erdogan le ha dado el poder de despedir a muchas personas de sus empleos sin justa causa. Estas decisiones arbitrarias han empeorado las condiciones de vida para muchas personas. El académico Nuriye Gülmen y la profesora Semih Özakça comenzaron una huelga de hambre en Ankara el 9 de marzo, después de ser despedidos de sus empleos usando el Decreto Ley (KHK). Las huelgas de hambre están otra vez a la orden del día en Turquía, pero el gobierno guarda silencio.
Nuriye Gülmen y Semih Özakça comenzaron una “sentada” en la calle Yüksel, en el Parque Kizilay de Ankara, para protestar por sus despidos como académicos y hace varios meses comenzaron una huelga de hambre.
Aunque Nuriye Gülmen y Semih Özakça ganaron la atención pública, el gobierno todavía no tomó ninguna acción para poner fin a la huelga de hambre. Día a día dos personas están más cerca de perder de sus vidas y no se hace nada para parar un final trágico. La policía y las autoridades atacan la huelga de hambre pacífica; muchos manifestantes han sido detenidos.
Otras ciudades han mostrado su apoyo y la huelga de hambre ha recibido el reconocimiento nacional e internacional. Las protestas ocurrieron en muchas partes de Turquía, incluyendo Aydin, Bodrum, Didim, Ankara, Estambul y Düzce, y hubo ataques contra esos activistas, que fueron detenidos y golpeados. Conforme las detenciones, Nuriye Gülmen, quien se ha debilitado mucho, dijo, «Esta es mi casa y la de Semih. Si los ataques continúan no saldremos de aquí. Si nuestros amigos son detenidos, tendrán que llevarnos también.»
El día 69 de la huelga de hambre, Nuriye Gülmen y Semih Özakça enviaron su solidaridad por la huelga de hambre en curso de prisioneros palestinos. «Representamos a los pueblos del mundo», dijo Nuriye Gülmen, «Hoy, nuestra resistencia lleva 189 días y 69 días de hambre. Este es un día muy significativo y especial para nosotros. Porque hoy dedicamos el día 69 de nuestra huelga a prisioneros en huelga de hambre en Palestina. De hecho, compartimos el hambre, el mismo hambre con ellos. Los malhechores son los mismos, ellos nos acechan con su persecución, ellos son los mismos que nos echan de nuestros empleos. Ellos vienen del mismo tipo, y nosotros venimos del mismo tipo, también. Representamos a los pueblos del mundo. Hoy estamos orgullosos de compartir el hambre con ellos».
En Dersim, Anatolia Oriental, Turquía, Kemal Gün (70) ha estado en huelga de hambre durante 83 días exigiendo los huesos de su hijo muerto, que fue asesinado por las autoridades durante un ataque aéreo en el área. Kemal Gün siguió su protesta pacífica hasta que las autoridades aceptaron su demanda el día 83 de su huelga de hambre. Sin embargo, después de recibir los huesos, él declaró: «No terminaré mi huelga de hambre hasta tener todos los huesos de mi hijo. Aquí hay solo 160 huesos. En la bolsa hay solo la mitad de los huesos que recogí con mis propias manos. Si me dan todos los huesos, los llevaré a mi pueblo en Erzurum y los enterraré». En el día 77 de su huelga de hambre, Kemal Gün pidió a la gente en Ankara que apoyase la honrada lucha de Nuriye Gülmen y la Semih Özakça.
A esta altura, es importante declarar que las huelgas de hambre, después de treinta días comienzan a causar problemas serios de salud. La gente en huelga de hambre rechaza proteínas, minerales, vitaminas, aceites y energía que es usada en la producción de los tejidos. Como el cuerpo no puede regenerarse, el movimiento causa pérdida de energía muy rápidamente. En los primeros 30 días se pierden entre 5 y 10 kilos.
Después de 40 días, hay daños que pueden ocasionar tanto a la pérdida de tejido como la falla de órganos, y esto puede conducir a la muerte. Después del día 60 de la huelga de hambre, los órganos vitales comienzan a ser afectados, y podría haber consecuencias como falla de corazón y de riñón, o bien debilitamiento del músculo del corazón –debido a la debilidad excesiva– podría causar la muerte repentina. ¡Nuriye y Semih han estado en huelga de hambre durante más de dos meses, la seriedad de sus condiciones de salud es inevitable y hay que tomar una acción para parar esto enseguida!
Las protestas de Gülmen y Özakça comenzaron hace 192 días con una “sentada” en Ankara, en la calle Yüksel, Monumento de Derechos Humanos, y se extendieron por 120 días. Enseguida después de aquella acción comenzó una huelga de hambre. Gülmen y Özakça solo han estado consumiendo una cierta cantidad de azúcar y agua durante más de dos meses; sin embargo, ninguna respuesta ha sido dada por el gobierno. Conforme la situación, los representantes gubernamentales con los cuales se pusieron en contacto dijeron que ellos no podían hacer nada. El vicepresidente de Derechos Humanos del AKP, Ibrahim Aydemir, dijo: «según la decisión colectiva tomada en el grupo, no haremos declaraciones sobre este hecho». Claramente, el AKP y el régimen de Erdogan niegan el derecho a vivir, prolongan el tiempo para tomar medidas, y dos personas mueren mientras el mundo observa.
Exigimos a las autoridades turcas oír la voz de Nuriye y Semih.
¡Apoyamos la vida, no la muerte!
Se deben tomar medidas inmediatamente.
Traducción: Natalia Estrada.