La semana anterior se dió a conocer un proyecto de ley presentado por un puñado de diputados de la Libertad Avanza. El mismo busca derogar la Ley de Interrupción Voluntaria del Embarazo (IVE).
Está más que claro que estos políticos buscan avanzar con la quita de derechos lo más rápido posible y de cualquier manera. Cómo no pudieron imponer la aprobación del DNU ni la Ley Ómnibus, proceden a presentar este proyecto que afecta directamente a la mujer trabajadora. Porque las mujeres que hacen uso de este derecho en la actualidad, son las mismas que morían por abortos clandestinos en nuestro país cuando era ilegal.
Hoy más que nunca debemos plantarnos en defensa de los derechos ganados. Esta conquista es histórica, pero la hicimos efectiva en 2020 con la lucha de miles en las calles al grito de – “educación sexual para decidir, anticonceptivos para no abortar, aborto legal para no morir”. Es por eso que NO podemos dejar que este decreto avance. Aunque la ley como está tiene muchas limitaciones, sobre todo la objeción de conciencia la cual venimos denunciando, por la falta de implementación efectiva en algunas provincias en las cuales la iglesia tiene mucho peso. Retroceder a la ilegalidad sería terrible para las mujeres trabajadoras y de los sectores populares, que venimos sufriendo día a día los ataques de Milei y sus representantes de la mano de la hiperinflación, aumento de los servicios esenciales, recortes de presupuestos en educación y salud, desocupación entre otras, que nos arrastran a la miseria.
Por todo esto, creemos que es urgente la unidad de todos los sectores y la autoorganicemos en los lugares de trabajo, de estudio y en los barrios justo a nuestras compañeras y compañeros para rechazar de plano el avance de este proyecto. Debemos exigirle a las centrales traidoras que se pongan al frente de esta lucha.
Pero para esto debemos organizarnos y aplicar métodos de autodefensa, ya que este gobierno de Milei de la mano de Burllich con su protocolo antipiquete, va a querer imponer su política a la fuerza, ya lo vimos con la represión y apresamiento de compañeros que enfrentabamos el DNU.
Pero no debemos quedarnos solo con exigir que no pase la derogación de la ley, tenemos que ir más allá. Exigir la eliminación de la objeción de conciencia, basta de acuerdos con las iglesias que atrasan décadas en la conciencia. Cómo el acuerdo firmando por la ministra de capital humano Petovello con el pediatra Abel Albino ultra católico y militante de Opus Dei, referente contra el aborto y que además plantea -“que la masturbación es una adicción y que los preservativos no protegen”. Todo esto a espaldas del pueblo. Iglesia y estado asuntos separados, dejemos de subsidiar las iglesias, que esa plata vaya a los hospitales y escuelas.
Combatir los recortes de presupuestos en salud y educación para implementar la Educación sexual y la IVE en todo el pais, al contrario de lo que propone el nuevo gobierno de mantener los mismos presupuestos de 2023 para el 2024, que no alcanzarían ni para el funcionamiento del semestre. Plata y recursos tiene nuestro país pero deciden seguir pagar al Fondo Monetario, entregar nuestros recursos a manos privadas, y seguir saqueando al estado y afectando la vida de los trabajadores.
Si dejáramos de pagar la deuda, cobraramos impuestos a los grandes monopolios, multinacionales, terratenientes y dejáramos de subsidiar a las iglesias que se vienen haciendo ricos a costa de estás políticas, podríamos no solo mejorar los problemas que atañean a las mujeres sino al conjunto de los trabajadores.
¡Basta de chamullo no se afecta a la casta, se afecta a las y los trabajadores!