¡Basta de violencia contra las mujeres! ¡Basta de feminicidios! ¡ALTO al machismo!
Por: Corriente Socialista de los Trabajadores – CST, México
Otra vez las mujeres ganamos las calles en todo el mundo para protestar contra la violencia, la opresión, el abuso, el acoso, la marginación, la invisibilidad, la desigualdad, la humillación que a diario sufrimos. Salimos a exigir nuestras demandas… Y nos sobran razones para hacerlo.
En México son 20 mil mujeres las asesinadas en los últimos tres años con base en datos del Observatorio Ciudadano Nacional del Feminicidioy cada día hasta 13 mujeres son víctimas del mismo delito. A fines de octubre de este año, según datos del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública, se registraron un total de 625 asesinatos de mujeres por razones de género y 1.995 homicidios dolosos de mujeres. Hay más datos oficiales de violencia contra la mujer en los primeros seis meses del año: 96 víctimas de secuestro, 932 denuncias de corrupción de menores, 337 por trata de personas, 145.933 por violencia familiar y 3.295 por violencia de género, además se recibieron 171.340 llamadas denunciando violencia de género y, durante el mes de junio, 884 llamadas por denuncias de abuso sexual.
Estos datos no muestran toda la violencia ejercida contra las mujeres, pues es bien sabido que no se denuncian todos los hechos violentos. Por vergüenza, miedo o desconfianza en las instituciones que finalmente poco resuelven a favor. Entre 2022 y octubre de este año, asesinaron a 10 de los 118 casos de feminicidio denunciados en la Ciudad de México, a pesar de que las víctimas habían alertado a la Fiscalía de Justicia capitalina sobre la violencia ejercida en su contra por parte de los probables perpetradores. Para este 25N las madres, hermanas e hijas de víctimas de feminicidio señalan una vez más la violencia procesal a la que se enfrentan en juicios donde, además de la impunidad al momento de resolver los casos, los agresores gozan del beneficio de los derechos humanos, pero no así las familias de las víctimas asesinadas.
En el ámbito laboral la violencia contra la mujer crece. Crece a la par que crecen las exigencias de la explotación por parte de las empresas, gerentes y jefes, quienes cuentan con la complicidad de los “charros” sindicales que ejercen, alientan y protegen las peores conductas machistas para mantener oprimidas a las mujeres, enfrentar al trabajador contra sus compañeras trabajadoras, dividiendo de ese modo al colectivo laboral para mejor explotarlo.
En este año, gracias a la lucha de las mujeres en las calles, la Suprema Corte finalmente resolvió despenalizar el aborto en todo el país. Es una conquista pero parcial, como la Ley “Olimpia”, la de Acceso de las Mujeres a una Vida Libre de Violencia, o el Art.4º de la Constitución. Porque a la vez, en 2023 México cayó dos posiciones en el Índice Global de Brecha de Género de WEF y la violencia digital se ha incrementado muchísimo en el último año y medio registrándose un promedio de cinco denuncias diarias de mujeres que han vivido violencia digital. Todo esto muestra el desinterés de las instituciones, gobiernos y sindicatos “charros” por aplicar el principio de igualdad en los Derechos Humanos de las mujeres, debido a la naturalización de prácticas discriminatorias y violentas contra ellas que reproducen la dominación sobre las mujeres.
Con un sistema judicial, policial y de seguridad, con “charros” sindicales y un régimen de gobierno machista –como los que tenemos- al servicio de la explotación, la opresión y el saqueo, todas estas leyes y medidas ¡no acabarán con la desigualdad, la discriminación y la violencia que sufrimos las mujeres, en especial las trabajadoras, las campesinas, las indígenas, las migrantes!
El gobierno de la 4T, Claudia Sheinbaum y Clara Brugada de Morena, Xóchitl Gálvez del PAN-PRI-PRD, Guadalupe Taddei desde el INE y desde todas las instituciones del estado hablan mucho en contra de la violencia hacia las mujeres pero en los hechos nada hacen. Los datos muestran que la violencia contra la mujer aumenta, como aumenta la represión, la pobreza, los bajos salarios, la pérdida de derechos laborales, el deterioro de los servicios públicos, el despojo, la entrega, la dependencia económica de los grandes capitales.
Es que machismo, violencia, opresión y explotación van de la mano. Todas estas lacras le sirven al descompuesto sistema capitalista para que unos pocos sigan sacando ganancia a costa de la mayoría -mujeres y hombres- que trabajamos y sufrimos miserias. Un sistema que nos conduce a la barbarie, que alimenta y sostiene las conductas machistas, la opresión de la mujer, la desigualdad entre mujeres y hombres, para mantener dividida a la clase trabajadora, a los pobres, a los oprimidos, para divididos explotarlos mejor.
Por eso este 25N salimos a las calles por: ¡Basta de violencia contra las mujeres, basta de feminicidios! ¡Justicia para las víctimas, castigo a los agresores! ¡Fuera los machistas “charros” de los sindicatos! ¡Por sindicatos verdaderamente democráticos, independientes de gobiernos y partidos patronales, que enfrenten la violencia contra la mujer para unir a los trabajadores en las luchas por sus reclamos!
Solidaridad con las mujeres palestinas y ucranianas en su lucha por la liberación nacional
Este año ganamos las calles, además, en solidaridad con las mujeres palestinas y ucranianas que están luchando por la liberación de sus pueblos, resistiendo invasiones de poderosos ejércitos imperialistas. Las mujeres ucranianas llevan soportando casi 2 años de una guerra de invasión y ocupación de las tropas rusas del asesino Putin con sus permanentes bombardeos.
Las mujeres palestinas sufren desde hace 75 años el despojo de sus tierras y hogares, violaciones y el asesinato masivo de su pueblo. EEUU y las principales potencias de aquella época fundaron Israel, un estado teocrático nazi-sionista, que condena a los palestinos -habitantes naturales de la región- a vivir en un régimen de apartheid. Un estado construido sobre el terror que sirve de enclave colonial y base militar para controlar, oprimir y explotar a todos los pueblos de Medio Oriente.
Hoy, ante la ofensiva genocida de Israel, las mujeres y los niños palestinos son las víctimas privilegiadas de las fuerzas armadas y colonos que han jurado no perdonarlas. Violencia contra las mujeres palestinas son los mortales bombardeos de Israel a escuelas, hospitales, universidades y hogares palestinos, el despiadado bloqueo, la salvaje invasión y ocupación que las humilla con controles o las condena -junto a sus hijos- a la vida de refugiadas, padeciendo hambre, enfermedad, desocupación…
¡Exigimos al gobierno de AMLO -que se dice Humanista- que rompa relaciones diplomáticas, comerciales y militares con el Estado de Israel!
¡Alto al asedio y genocidio contra Gaza! ¡No al régimen sionista de apartheid!
¡Por la derrota militar de Israel! ¡Por una Palestina libre, laica, democrática y no racista, del río hasta el mar!