La semana comenzó con una polémica en la izquierda: la donación de R$ 120.000 [U$S 37.000, aprox.] a la campaña de Marcelo Freixo (PSOL-Rio de Janeiro) en 2012, por la empresa Victor Hugo Demolições Ltda. Aceptar dinero de empresas, por sí solo ya lo consideramos abrir mano de la independencia política. Pero, en este caso, no es solo eso: esa empresa fue responsable por la demolición de la Vila Autódromo luego de la remoción forzada [desalojo] por la prefectura de Rio de Janeiro.
Por: PSTU – Brasil
Una breve nota publicada en la página de Freixo en el Facebook alega que fue “todo registrado conforme la ley y publicado por la Justicia Electoral”, y que “la donación de 2012 es anterior a las remociones en Vila Autódromo”.
Nosotros decimos: en primer lugar, aun cuando haya sido legal, aceptar dinero de empresas es inmoral. Para el PSTU, la independencia de clase es un principio. Ahora bien, las empresas están comprometidas con el Estado burgués y no tendrán ningún pudor en promover cualquier acción para garantizar sus ganancias, incluso si eso es destruir las casas de familias pobres. ¿Freixo y la dirección del PSOL no sabían eso cuando aceptaron esa donación?
Este no es el primer episodio de este tipo involucrando al PSOL. En 2008, el PSOL recibió dinero de la Gerdau para la campaña de Luciana Genro. Recientemente, el partido apareció en la lista de la Oderbrecht. Muchos militantes honestos del PSOL están posicionándose contra la donación, y con toda razón. Esa práctica es, como mínimo, una falta de respeto a esos compañeros y un desprecio por sus opiniones. En el caso del PSOL ha prevalecido la práctica de sus dirigentes, ignorando a su base, que cree en un discurso de izquierda.
Freixo todavía dice: “rechazamos donaciones empresariales de forma pionera, antes de que la legislación electoral fuera modificada por el Supremo Tribunal Federal (STF) en setiembre de 2015”.
Queremos reafirmar que, en toda su historia, el PSTU nunca aceptó dinero de empresa ninguna y nunca lo aceptará. Como dice el viejo dictado: “quien paga la banda, escoge la música”…
[1] El Grupo Gerdau es una de las empresas productoras de acero, líder en su ramo, y agente de consolidación de la siderurgia mundial, presente en 14 países [N. de T.].
[2] La Oderbrecht o Grupo Oderbrechet es un conglomerado brasileño, de capital cerrado, que actúa en 21 países en el mundo, en áreas de construcción, ingeniería, química, petroquímica, energía y saneamiento, entre otros rubros, y que actualmente está involucrada en los casos de corrupción de la Operación Lava Jato en el país [N. de T.].
Traducción: Natalia Estrada.
