En la tarde de hoy (12/9) un incendio se inició en la Ocupación Esperanza, en Osasco. Para los luchadores del Brasil entero esa Ocupación es una vieja conocida, compañera de manifestaciones y protestas, comunidad organizada, combativa, solidaria que siempre recibió y acogió bien a aquellos y aquellas que –independiente de donde vinieran– llegaron juntos para sumar.
Nota del Movimiento Lucha Popular
Las llamas quemaron algo alrededor de 40% de la comunidad. Las lenguas de fuego transformaron en cenizas las pocas pertenencias de un pueblo pobre, negro, trabajador y muy guerrero.
Hay todavía muchas barracas que no fueron quemadas y las familias moradoras de esas viviendas van a quedarse en ellas y resistir. Hace tres años que afincamos nuestra Esperanza en este latifundio vacío. Ya intentaron sacarnos de muchas formas: a través de la falta de interés de los gobernantes, a través de amenazas y de otras maneras también.
Hasta hoy resistimos. Continuaremos resistiendo.
La Policía Militar (PM), en lugar de proteger y ayudar a las familias, intimida y no deja que los trabajadores lleguen cerca de sus casas para recoger lo poco que les quedó. La PM agredió y arrestó al compañero Avana, abogado de las familias y militante de Lucha Popular.
Queremos saber si las familias que continúan en la ocupación tendrán protección y seguridad.
¡Nosotros no vamos a retroceder ni un milímetro! Nosotros no dejaremos que quemen nuestros sueños y nuestros derechos. Nosotros no pararemos hasta que la justicia sea el plato servido en la mesa de cada sin techo de este país.
El sábado, día 10/9, el prefecto de Osasco –Jorge Lapas– estuvo en asamblea general de los moradores y llevó un Decreto de Desapropiación del Área. Llevó también palabras de compromiso con las familias.
Queremos saber ahora la realidad efectiva de ese compromiso. Queremos que se abra una escuela próxima a la ocupación para que las familias puedan abrigarse cerca del lugar donde mantienen sus vínculos sociales y afectivos.
No queremos una escuela allá en el Jardín Baronesa, o allá en el Jardín Munhoz, que, tan distantes, dificultan que las familias estén cerca de lo que es suyo, de su lucha, de sus camaradas.
Lucha Popular ahora viste sus camisas más rojas y va a resistir hasta que la victoria de este pueblo sea tan inmensa que apague de la memoria las imágenes del horror que vivimos hoy, la imagen de la fuerza bruta y violenta de la ganancia del capital.
Todos y Todas los que puedan ayudar, que sumen, de pecho abierto y sin interés. Nuestro interés es apenas y tan solamente justicia.
Montamos un punto de recibimiento de donaciones en la sede de la Compañía Kiwi de Teatro, que queda en la calle Frederico Abranches 189, próximo al Largo de Santa Cecilia. Desde ya agradecemos a todos los camaradas que puedan donar ropas, alimentos y agua. Desde ya agradecemos también a los camaradas de la Kiwi, que en esta hora nos abrieron las puertas y nos acogieron en la necesidad.
Que todos los que puedan se sumen también a las iniciativas de reconstrucción de las barracas. Que vengan con nosotros a reerguir, tabla sobre tabla, nuestra comunidad y nuestra lucha.
Precisamos de maderas, telas, muebles usados.
Precisamos que quien lucha crea que NUNCA nos derrumbarán.
Movimiento Lucha Popular
Organizar a los Abajo para derrumbar a los de Arriba
