La comisión de investigación de la ONU, designada por el Consejo de Derechos Humanos de la ONU para reunir pruebas e identificar a los perpetradores de violaciones de derechos humanos, acusó a Israel de obstruir las investigaciones sobre el 7 de octubre.
Chris Sidoti, uno de los tres miembros de la comisión, declaró el 16 de abril que “cuando se trata del gobierno israelí, vemos no sólo una falta de cooperación sino una obstrucción activa de nuestros esfuerzos para reunir pruebas de testigos y víctimas israelíes sobre los acontecimientos que ocurrieron en el sur de Israel”.
Las pruebas reunidas sirven de base para los procesos por crímenes de guerra en la Tribunal Penal Internacional.
La diplomacia israelí en Ginebra justificó esta posición afirmando que “las víctimas nunca recibirían la justicia o el trato digno que merecen por parte de la Comisión de Investigación y sus integrantes”, ya que tenía un largo historial de declaraciones antisemitas y antiisraelíes.
A principios de este mes, la Comisión recibió dos misiones más: investigar la violencia de los colonos, y la transferencia de armas a Israel. Sus conclusiones se presentarán al Consejo de Derechos Humanos de la ONU en junio de 2025. (1)
El ataque del 7 de octubre
El Estado de Israel no quiere una investigación independiente sobre los acontecimientos del 7 de octubre. No es por casualidad. El mejor documental de investigación sobre el 7 de octubre hasta la fecha fue producido por Al-Jazeera, basándose en las informaciones disponibles. En términos generales, da el siguiente informe.
A las 6 de la mañana del 7 de octubre de 2023, alrededor de 1.200 combatientes de la resistencia palestina liderados por Hamás se reúnen y reciben instrucciones sobre el ataque. Se trata de instrucciones de combate militar que explican qué armas son adecuadas para atacar tanques y vehículos blindados.
A las 6.30 horas, los combatientes rompen en diez puntos la barrera entre la Franja de Gaza y los territorios ocupados por Israel en 1948 portando armas ligeras letales (ametralladoras y misiles portátiles antitanques). La gran mayoría ingresa por tierra, caminando o en vehículos comunes, mientras que algunos ingresan por mar y aire utilizando dispositivos improvisados. Al mismo tiempo, se lanzan drones contra torres y antenas del sistema de comunicaciones israelí y se lanzan miles de cohetes desde Gaza.
A pesar de que el servicio de inteligencia israelí había recopilado información sobre los preparativos del ataque durante meses (y había recibido una advertencia del servicio de inteligencia egipcio unos días antes del ataque), no tomaron medidas, no hubo aumento de tropas en la frontera, y en las bases militares israelíes en la región fueron tomadas por sorpresa convirtiéndose en un blanco fácil para los combatientes palestinos.
Los combatientes toman bases militares y ejecutan a soldados israelíes. Sin encontrar resistencia, los combatientes se topan con una fiesta que reúne a cientos de jóvenes (seguramente la mayoría de ellos soldados en actividad o de reserva, ya que el alistamiento militar es obligatorio) y ejecutan a varios de ellos. También entran en los asentamientos israelíes (kibutz) cercanos.
A las 8:30, unos cientos de residentes de Gaza, de manera voluntaria y desordenada, atraviesan la barrera y llegan a los asentamientos israelíes. 253 israelíes son arrestados y llevados a Gaza.
A las 9 de la mañana, las tropas israelíes comienzan a llegar a la región con helicópteros y tanques. Atacan cualquier objetivo humano y, de esta manera, matan a palestinos e israelíes.
En total, murieron 1.154 israelíes y extranjeros, de los cuales 782 eran civiles y 372 eran soldados y policías israelíes. Además de estos, murieron alrededor de 200 palestinos. Hasta el momento no se sabe cuántos murieron a manos de combatientes palestinos y cuántos a manos de tropas israelíes.
Entre los 782 civiles, 36 eran menores de edad, 13 menores de 12 años. No hubo asesinato de 40 bebés, ni a ninguno de los muertos se les cortó la cabeza, como dijo la prensa israelí y occidental en los primeros días después del ataque. Las denuncias de violación nunca fueron investigadas de forma independiente porque el gobierno israelí nunca permitió que la Comisión de Investigación de la ONU lo hiciera. (2)
Lugar en la historia
El ataque de la resistencia palestina liderada por Hamás volvió a colocar la cuestión palestina en la agenda mundial. De esta forma, se congeló la normalización de las relaciones entre la mayoría de los países árabes e Israel. El ataque también expuso las debilidades de la política de seguridad de Israel basada en la limpieza étnica y el apartheid, y con ello quemó la imagen del primer ministro Benjamin Netanyahu y probablemente selló su futuro.
El ataque es descaradamente calificado de terrorista por los medios de comunicación de todo el mundo. Bajo el calor del genocidio de los palestinos en Gaza, las masacres en Cisjordania y la represión en Al-Quds/Jerusalén y en toda la Palestina ocupada en 1948, el pueblo palestino y las voces de importantes intelectuales estadounidenses de origen judío discrepan con la definición de “ataque terrorista”.
Hasta la fecha, 71% de los palestinos en Gaza y Cisjordania están de acuerdo con la decisión de la resistencia palestina liderada por Hamás de lanzar el ataque a pesar del enorme costo material y humano. Y 90% de los palestinos en Gaza y Cisjordania entienden que la resistencia palestina no cometió ninguna atrocidad. (3)
Judith Butler, profesora y filósofa estadounidense, hija de inmigrantes judíos, afirmó en una mesa redonda celebrada en París el 3 de marzo que el atentado del 7 de octubre no puede calificarse de acto terrorista ni de ataque antisemita. Calificó el ataque como un “acto de resistencia armada”. (4)
Una reflexión muy interesante hizo el historiador judío estadounidense Norman Finkelstein. Hijo de supervivientes del Holocausto nazi, es autor de varios trabajos sobre la cuestión palestina, entre los que se destaca “La industria del Holocausto”.
En una entrevista con Marc Lamont Hill, el profesor Finkelstein comparó el ataque del 7 de octubre con la famosa rebelión de negros esclavizados liderada por Nat Turner en el estado de Virginia (Estados Unidos), en 1831. En esta rebelión, los esclavizados mataron a alrededor de 60 ciudadanos blancos. Según los historiadores, estas muertes no ocurrieron por casualidad. El líder de la rebelión, Nat Turner, dio la orden de matar a todos los blancos.
La reacción de los esclavistas blancos fue brutal. Además de calificar de atroz la rebelión negra, 120 esclavos negros fueron inmediatamente linchados y otros 80 fueron condenados a muerte y ahorcados. Además, se impusieron nuevas leyes sobre esclavos que prohibían la alfabetización de los negros y la reunión de negros para cualquier propósito.
La rebelión de Nat Turner inspiró a John Brown a liderar un asalto al arsenal del ejército en Harpers’ Ferry, Virginia, en 1859 con el objetivo de iniciar un levantamiento armado contra la esclavitud. Detenido, fue condenado a muerte en la horca.
Ambas rebeliones fueron calificadas descaradamente de atroces por las autoridades esclavistas. Sin embargo, hoy, tras el fin de la esclavitud y los logros del movimiento por los derechos civiles, ambas rebeliones se consideran hitos en la lucha contra la esclavitud. Nat Turner y John Brown ocupan un lugar de honor en el panteón de héroes que lucharon por la libertad en los Estados Unidos. (5)
Todavía es demasiado pronto para saber si el ataque del 7 de octubre fue un momento más en la lucha palestina por su liberación o si fue un punto de inflexión contra el racista Estado de Israel. El tiempo responderá.
Muchos critican el ataque del 7 de octubre por su violencia. El profesor Finkelstein plantea la pregunta: ¿qué opciones hay disponibles para la resistencia palestina? Hamás ganó las elecciones de 2006 y la reacción de Israel, Estados Unidos y Europa fue imponer un bloqueo contra la franja de Gaza, transformándola en un gran campo de concentración. Hamás propuso una tregua de largo plazo (hudna, en árabe) pero Israel nunca aceptó negociar. ¿Qué otra alternativa quedaba si no la resistencia armada?
Aún con la violencia, el famoso dramaturgo y poeta Bertold Brecht, en una crítica a la historiografía plutocrática de las elites y de los vencedores, escribió:
“Del río que todo arrastra se dice que es violento. Pero nadie llama violentas a las márgenes que lo comprimen”.
(1) https://www.reuters.com/world/middle-east/un-commission-accuses-israel-obstructing-oct-7-probe-2024-04-16/
(2) https://www.youtube.com/watch?v=_0atzea-mPY
(3) https://www.pcpsr.org/en/node/969
(4) https://www.lemonde.fr/en/opinion/article/2024/03/15/judith-butler-by-calling-hamas-attacks-an-act-of-armed-resistance-rekindles-controversy-on-the-left_6621775_23.html
(5) https://www.aljazeera.com/program/upfront/2024/4/5/norman-finkelstein-on-gaza-the-us-couldve-stopped-israel-on-day-one Traducción: Natalia Estrada.
