Mar Abr 16, 2024
16 abril, 2024

¡Esto no va más!

Cortes de luz, tarifazo en el transporte, inflación…

 
Los masivos cortes de energía eléctrica que se producen a lo largo y a lo ancho del país son el reflejo de la profunda crisis estructural en la que se encuentra sumergido nuestro país luego de años de falta de inversión, del robo que significaron las privatizaciones, con empresas que ganaron fortunas, de tarifas cada vez más caras y subsidios millonarios que salen de nuestro bolsillo para favorecerles aún más sus ganancias, mientras no realizan las obras necesarias.

El gobierno una vez más mira para otro lado y utiliza su doble discurso, que a esta altura ya no engaña a nadie, para echarle la culpa al clima, a las empresas que no cumplen… ¡parece que no fueran ellos quienes gobiernan! Cristina, encerrada en su mansión con luz de El Calafate y escondiendo la cabeza como el avestruz, no abrió la boca ante la situación desesperante de miles de compañeros, mientras por los medios de comunicación Capitanich, el “capitán” del acuerdo gobierno-oposición patronal, es el que intenta explicar lo inexplicable.

La realidad es que fue este mismo gobierno el que en la última década subsidió por millones a las empresas como Edesur y Edenor. Es el mismo gobierno que en medio de la crisis energética continúa entregando el petróleo a las multinacionales como Chevron y paga más de 8.000 millones de dólares de “indemnización” a REPSOL.
Las consecuencias las sufrimos los trabajadores que no tenemos generadores en cada casa para capear los cortes de luz, la sufren los pequeños comerciantes arruinados por cada corte, la sufren, fundamentalmente, los sectores más postergados de las barriadas populares, allí donde muchas veces no entran ni las ambulancias y donde la inseguridad se acrecienta, que se quedan sin luz y hasta sin agua. Entre tanto, el Ministro De Vido nos pide calma y que “le tengamos confianza” a su política, casi nos recuerda el “síganme, no los voy a defraudar”… [frase utilizada por el ex presidente Menem].

¡Por cada corte un corte! ¡Exijamos soluciones ya!
 
Los trabajadores y el pueblo, hartos, han empezado a realizar cortes de calles, rutas y vías férreas para reclamar ante los apagones, entendiendo que el único camino para hacerse oír es salir a la calle y luchar. ¡Por cada corte de energía tenemos que organizar un corte de calle o ruta! Hay que unificar las protestas organizando movilizaciones a las centrales de Edesur y Edenor y los municipios, necesitamos unificar los reclamos de todos los afectados marchando a Plaza de Mayo y todas las plazas del país para exigir una solución inmediata para los damnificados y medidas de fondo. Tenemos que exigir soluciones ahora mismo para terminar con los cortes. El Estado debe hacerse cargo, declarar la emergencia energética  y proveer de generadores, agua y alimentos frescos a los afectados, indemnizar a los pequeños comerciantes por las pérdidas sufridas, cortar el alto consumo de los shoppings y grandes empresas e industrias (prohibiendo suspensiones del personal o la reducción salarial) y priorizar la necesidad de energía de los sectores populares.
Al mismo tiempo, hay que avanzar en soluciones de fondo. En primer lugar echando a las privatizadas sin un peso de indemnización y exigiendo [que] devuelvan lo que se robaron en todos estos años, reestatizando las empresas de energía. Junto con eso hay que realizar las obras de infraestructura necesarias para responder a la demanda de consumo, que se deje de pagar millones a los buitres de la deuda y se utilice ese dinero para hacerlas.

Inflación y tarifazo: ajuste en la oscuridad
 
Mientras se registran los cortes, el gobierno no solo no responde sino que va por más ajuste. Mientras miles sufren la falta de luz, los precios de los alimentos de la canasta familiar en los últimos días se han disparado y no paran de subir llevando la inflación hasta las nubes y generando que los salarios queden por el piso y cada día alcancen menos. Para las familias trabajadoras poder armar una mesa digna para las fiestas se ha vuelto casi una odisea.

Como si todo esto fuera poco ahora anuncian un brutal tarifazo en el transporte público de colectivos en Capital y Buenos Aires llevando el boleto mínimo de 1,50 a 2,50, es decir, ¡un aumentazo del 66%! Otro nuevo ataque al bolsillo de los sectores populares.
Y mientras todo aumenta, el gobierno, en acuerdo con toda la oposición patronal y los empresarios, pretende poner tope a los aumentos salariales. Esa es la verdadera cara del “modelo” K y su dékada “ganada”, más ganancias y entrega para las grandes empresas y multinacionales, más millones para los buitres de la deuda; y más ajuste para los trabajadores y el pueblo.

El gobierno y el pacto patronal, conscientes de la bronca que se acumula por abajo, también preparan su respuesta represiva ante el temor de un estallido de la bronca popular. Por eso designa a un represor como Milani al frente del ejército, prepara sanciones a los policías que rompieron su “cadena de mandos” en el conflicto policial ya que necesita una policía que obedezca de arriba-abajo a la hora de reprimir, y condena a perpetua a los petroleros de Las Heras intentando dar una lección contra los que luchan. Es parte del mismo modelo de ajuste, entrega y también represión.

Hay que derrotar el ajuste y la entrega
 
Los cortes de luz (así como en invierno fueron las inundaciones), la inflación y el tarifazo al transporte, así como el intento de poner techo al salario o las jubilaciones de miseria, o los despidos y suspensiones que empiezan a crecer, no son hechos aislados. Son parte del mismo plan de ajuste que también destruye nuestra salud y educación públicas, que permite el saqueo de nuestros recursos naturales a manos de las multinacionales extranjeras o provoca tragedias anunciadas como las de Once y Castelar. Por eso es necesario enfrentarlo de conjunto y con la mayor unidad para derrotarlo.

Lamentablemente, las cúpulas burocráticas de las centrales sindicales y la mayoría de los sindicatos actúan como socios y cómplices del pacto gobierno-oposición patronal- empresarios, por eso no dicen una palabra o, en el mejor de los casos, critican y no mueven un dedo.
Mientras, la bronca crece y empieza a estallar por abajo, en cada uno de los cortes de vecinos indignados, en la lucha de los petroleros de la Patagonia por su salario, en los empleados estatales en muchas provincias y tantos otros. Hay que exigirles a los dirigentes sindicales que rompan su política de apoyo al gobierno y su modelo de ajuste y convoquen de inmediato a una lucha unificada por el conjunto de los reclamos.

Lo que necesitamos es un paro general, que sea inicio de un plan de lucha, para terminar con este modelo. Sabemos que no podemos esperar ni confiar ni [por] un segundo en los Caló, Yasky, Moyano o Michelli. Por eso tenemos que empezar a organizarnos desde abajo, desde cada lugar de trabajo y cada corte en los barrios para preparar y organizar la lucha unificada.

El FIT, que presentó una alternativa política y un programa de respuesta obrera y popular a la crisis en las últimas elecciones, debe ponerse al frente, con sus diputados y legisladores, de la más amplia y unitaria convocatoria a todos los sectores que estén dispuestos a enfrentar el ajuste, comenzando por los sindicatos, comisiones internas y delegados combativos, para transformarse en una herramienta de lucha.
Desde el PSTU te convocamos a encarar junto esta pelea.

• ¡Basta de cortes! ¡Que se declare la emergencia energética!

• ¡Reestatización ya de las empresas de energía eléctrica!

• ¡Inmediata respuesta a los damnificados!

• ¡No al tarifazo en el transporte!

• Contra la estampida inflacionaria: ¡Bono o plus de fin de año de emergencia ya! ¡Paritarias ya sin techo ni topes! ¡Por un salario mínimo de 8000 de básico y reajustable a la inflación!

• ¡Huelga general y plan de lucha hasta derrotar el modelo de ajuste, entrega y represión!

• ¡Libertad a los presos de Las Heras! ¡Fuera Milani!

Más contenido relacionado:

Artículos más leídos: